fariña

Caleta Olivia
La declaración del empresario Carlos Wagner, ex Presidente de la Cámara de la Construcción en la “era K” y quien fuera detenido la semana pasada en el marco de la causa denominada “Cuadernos de las coimas” debería preocupar no solo a ex funcionarios de la administración kirchnerista sino también a empresarios de la construcción, relacionados puntualmente con obras públicas en nuestra provincia.
Wagner, uno de los “arrepentidos”, declarará hoy y buscará llegar a un acuerdo para quedar en libertad.
Mucho de lo que diga ante el juez Federal Claudio Bonadio seguramente no hará mas que confirmar lo que otro “arrepentido”, Leonardo Fariña ratificó la semana pasada en el mismo juzgado Federal.
“Todo empieza desde lo que es la adjudicación de la obra publica”, dijo la semana pasada escuetamente Fariña quien con lujo de detalles descrió el “robo” que tuvo como uno de los principales escenarios a Santa Cruz. Lo que le vaya a contar Wagner hoy a Bonadio, seguramente pondrá en aprietos a mas de uno que pensó que quedaría impune.

Los empresarios
Fariña dijo algo que es un secreto a voces: “Esto no empezó en el 2003, cuando Néstor (Kirchner) llegó al Poder. El esquema fue una copia de lo que venían haciendo en Santa Cruz. Es decir copiaron el modelo, lo maximizaron”, describió Fariña, hace pocos días al periodista Luis Majul.
“Alla (en Santa Cruz) tenían al IDUV”, explicó con relación al organismo provincial desde donde se digitaba la obra pública y se diseño el modelo que luego se trasladaría a nivel nacional desde el Ministerio de Planificación Federal. De echo, los principales funcionarios provinciales fueron quienes manejaron esa súper Cartera; encabezada por Julio De Vido, seguido por José López y Robero Baratta, todos obedeciendo ordenes de “Néstor”.
Acerca de la “cartelización” de la obra pública, las licitaciones y el rol de la Cámara de Empresas, Fariña reveló : “el mecanismo formal lo tenían que simular, aunque ya estaba todo digitado.
Ya en el poder presidencial, el robo se hizo a gran escala. “Wagner, es un personaje central” describió Fariña y recordó que todo comenzó cuando estaba en ESUCO.
Decavial y Contrera hermanos, todas empresas vinculadas a UTE a Lazaro o a las grandes asignaciones de la obra pública”, precisó.

Maniobras
Fariña recordó como se fraguó todo el proceso licitatorio de las represas sobre el río Santa Cruz y como se robaron millones con la obra del tramo de ruta 3 entre Caleta Olivia y Comodoro Rivadavia.
“En abril o mayo del 2010 tenía el pliego de Cóndor Cliff y La Barrancosa que ya se sabía que se la iban a dar a Lázaro. Valía 16 millones de pesos por pliego. En el 2011 ya valía 21 millones de pesos y la obra seguía siendo para Báez. Pero cuando pasa lo del programa de Jorge Lanata sobre de la Ruta del dinero K, sumado a que ya venia el enfrentamiento con Cristina, le tiene que sacar la obra a Báez. Así se abre un nuevo proceso licitatorio y se la dan a Electroingeniería, que había presentado una Carta de Descuento fuera de plazo. Si no la ganaba Electro ingeniería, en realidad el que la debía ganar era Isolux (empresa a la que luego le dieron la obra de YCRT)”.
Vale mencionar que todos los actores de esta maniobra están presos, en la “causa de los Cuadernos”
En el caso de la ruta nacional 3 el precio inicial 674 millones de pesos. Báez recibió 2.892 millones, un 329 % de mayores costos. Se pagó la totalidad y apenas se terminó un 37 por ciento, según consta en la causa que se sigue en el Tribunal Oral Federal 2.
Sobre toda esta trama de corrupción seguramente hablará Wagner y confirmará lo revelado por Fariña; por eso mas de uno en Santa Cruz debería comenzar a preocuparse.

La caída de Lázaro
La “caída de Báez” comenzó apenas ocurrió la muerte del ex presidente; cuando Cristina y Máximo le reclamaron que les devolviera lo que consideraban suyo.
“Cuando muere Néstor, el patrimonio de Báez se empezó a mover. Había que blanquear una parte, otra enviarla al exterior y otra hacer negocios”, dijo quien fuera el principal asesor financiero de Lázaro.
“Muchos empresarios comenzaron a tener presiones de la ex presidente y su hijo.
Un reclamo de la autoría del patrimonio. Hay empresarios que negociaron y otros que no. Hay uno muy conocido que así como le dieron una empresa se la sacaron, Ezquenazi. Para eso fue el proceso de expropiación de YPF”, aseveró Fariña.