Ante la falta de asistencia por parte de Servicios Públicos hace más de diez días, habitantes de dicho barrio tomaron la determinación de impedir que los camiones que utilizan el cargadero para abastecer a ese sector y numerosas instituciones de la ciudad accedan al mismo.
Servicios Públicos asistía con cinco camiones al barrio, tarea que dejó de hacer hace más de una semana.
La Municipalidad también suministra agua con dos camiones, uno de ellos sufrió roturas y no pudo conseguirse el repuesto necesario. Ante esa situación, se afectó a otro que era utilizado en el barrio 150 Viviendas para no dejar sin el vital elemento a los vecinos.
El martes, un grupo de habitantes del sector se comunicó con el Secretario de Relaciones Institucionales Pablo Fernández para informar sobre la decisión de tomar el cargadero de agua.
El funcionario se presentó en el lugar para tomar contacto con quienes determinaron esta medida y solicitar que se permita la carga de los dos móviles que utiliza la Municipalidad para atender la demanda del sector. Cuando cedieron, la presión del agua era casi nula por lo que no se pudo concretar la carga.
“No alcanza con esos dos camiones, es un barrio grande completamente habitado. Es una situación que no nos compete dar solución pero desde la Municipalidad nos comprometimos a dar una mano, tratar de trabajar en conjunto con Servicios Públicos hasta que se dé una solución final”, manifestó Fernández.
Para volver a normalizar la situación, “Depende de SPSE que se vuelva a dar presión en ese cargadero y tomar contacto con nosotros para trabajar en conjunto para ayudar con el abastecimiento. Nosotros seguimos cumpliendo con nuestro compromiso”, agregó.
Esta situación también afecta al barrio Bontempo al que también abastecen estos camiones. “La Municipalidad está acompañando y se está preocupando por todas las necesidades que la gente está sufriendo”, finalizó.