Caleta Olivia
Hace una semana trascendió un hecho que en la práctica sería la confirmación del quiebre del “kircherismo histórico o fundacional; aquella célula de poder que se conformó hace casi 30 años en Santa Cruz y manejó el gobierno nacional por más de una década.
Desde la unidad Básica “Los Muchachos Peronistas”, aquella que impulsara la carrera política de la “familia Kirchner” exigieron la renuncia de Carlos Zannini, nada más y nada menos que el ideólogo de la “doctrina K”.
La postura que impulsa “Rudy” Ulloa, quien fue el hombre de confianza de Néstor Kirchner (desde que era conocido como “El Lupo” y nadie se imaginaba que llegaría a ser el “Nestornauta) tiene relación directa con el futuro de Cristina.
Es que la ex Presidente esta recluida en Santa Cruz y pese a sus intentos por mantenerse vigente en la política nacional – a fuerza de redes sociales y “twits,” – no logra terminar de posicionarse, sobre todo por lo que ella llama “persecución judicial”.
Casualmente hace una semana – cuando comenzó el operativo para echar al “Chino” – tuvo su primera señal que el problema es serio: El juez federal Claudio Bonadio la mandó a juicio oral. Y por como van las cosas, la causa del “Dólar Futuro” por la que esta procesada e irá a juicio, es solo la primera que mantendrá a Cristina ocupada en los Tribunales durante todo el año. Justamente, en un año electora.
El ex
Algo ya había adelantado el portal de noticias OPI Santa Cruz, cuando reveló que Ulloa impulsaba una salida “no elegante” de Zannini de la mesa chica del Frente Para la Vicori – PJ. Ayer, un periodista del diario Clarín fue mucho mas allá y reveló que en una conversación Cristina le reprochó a quien fuera el Secretario Legal y Técnico de la Presidencia durante 12 años, su falta de compromiso. Es que el “Chino” no solo fue quien dio sustento ideológico y jurídico al nacimiento del FPV, sino además fue quien diseñó el andamiaje para que el matrimonio presidencial supera con solvencia cada escollo legal que se le presentó durante el ejercicio de ambas presidencias.
Pero ahora esta desentendido e incluso, se lo acusa de “conspirar” contra el gobierno de la provincia de Santa Cruz, en manos de Alicia.
De este modo, el “ex compañero” encarna todos los temores de Cristina y familia: alguien que conoce todos los secretos y que pareciera que no esta dispuesto a colaborar en que sigan en el poder.
Proyecto propio
Según OPI, entre los reproches que le hacen a Zannini, está el de no encargarse de militar, de “estar ausente la mayor parte del tiempo” (prácticamente vive en Buenos Aires), no colaborar con el “armado” del nuevo frente y de no “esforzarse por reconstruir la mística que supo tener la UB fundacional del kirchnerismo más puro”, los llamados por más de 10 años, “paladares negros” que conformaban el grupo de confianza y de apoyo del gobierno nacional del 2003”.
Los miembros de ese sector kirchnerista dicen que el “Chino” priorizó sus intereses personales ante los de esa agrupación, sin dar más detalles y cerrando la misiva con la consigna “Volver a Néstor”.
Según este portal de noticias Zannino estaría pensando trabajar en “otro armado” político y la familia y allegados, no estarían en sus planes.
En esta línea estaría también el pedido para que la gobernadora remueva a Zannini de su cargo como Vocal en el Directorio del Banco Santa Cruz, que ocupa desde que dejó el gobierno nacional y fracasó como vice de la fórmula presidencial con Daniel Scioli.
Sospechas
“¿Me podés explicar por qué yo estoy denunciada en tantas causas y a vos no te llama ningún juez?”, le reclamó Cristina a Zannini según el periodista Pablo de León que “chequeo” esta conversación con varias fuentes y testigos directos.
Según este información la respuesta de “El Chino” no convenció a la expresidenta y tras su ira, la relación cotidiana que ambos mantenían se rompió.
La existencia de esa conversación y el planteo de Cristina fue confirmado por dos diputados nacionales, un intendente peronista y un exfuncionario que hoy frecuentan el Instituto Patria, sede del kirchnerismo en la Ciudad de Buenos Aires.
Cristina comenzó a sospechar cuando comprobó que no hay causa en contra de Zannini y solo “se lo investiga por las amenazas que el fiscal Guillermo Marijuan denunció haber sufrido, causa en la que también se involucra al exjefe del Ejército César Milani, hoy detenido”.
Lo que temería Cristina es que Zannini haya “arreglado su situación judicial y que por eso casi no ha tenido inconvenientes legales”
En la “volteada” de sospechas también habría caido el vicegobernador Pablo González, quien además de los “Cristinitas” y La Cámpora, apuntan por no estar más activo en defensa del “proyecto”.
“En La Cámpora santacruceña el enojo con Zannini alcanza incluso a Pablo González, el vicegobernador de Alicia K, a quien desde esa agrupación le asignan intenciones de limar a la mandataria para quedarse con su poltrona”, reveló Pablo de León.