Tierra del Fuego
Según el gremialista estatal, es una venganza política.
Familiares del gremialista estatal Pablo Micheli fueron procesados por el cobro de cheques sin rendición por la Justicia en la provincia de Tierra del Fuego.
El juez de instrucción fueguino Javier de Gamas Soler procesó el viernes pasado a cuatro funcionarios del Instituto Provincial Autárquico Unificado de la Seguridad Social (Ipauss), entre ellos a la hermana y otros dos miembros de la familia del titular de la CTA autónoma, a quienes acusa de defraudar a la administración pública a través del irregular cobro de cheques por montos superiores a $ 100.000.
Según publica hoy el diario La Nación, los involucrados son Ercilia Elizabeth Micheli, hermana del líder sindical; Marisa Sánchez, su consuegra, y Nadia Magaride, cuñada de Sánchez. El hecho ocurrió en 2014 y fue denunciado en la justicia provincial por el actual titular del Ipauss, Rubén Bahntje, designado por la gobernadora peronista Rosana Bertone.
En los fundamentos de su fallo, el juez Gamas Soler toma como base el cobro de nueve cheques, entre enero y agosto de 2014, por un valor total de unos $ 100.000, en los que habrían intervenido los familiares del dirigente y el cuarto empleado procesado, Alfredo Ríos. El magistrado también encontró inconsistencias en los asientos contables de la sede porteña de la entidad, a cargo de Sánchez y donde trabajaban los involucrados.
Según fuentes del gobierno fueguino, «al inicio de nuestra gestión se realizaron modificaciones del sistema previsional. Esto provocó la violenta resistencia de los sindicatos, entre los cuales se encontraba la CTA de Micheli», afirmaron cerca de Bertone. Y acusaron al sindicalista de «defender la caja» de la entidad, que en Buenos Aires maneja cientos de miles de pesos destinados a tratamientos de salud de alta complejidad.
En diálogo con La Nación, Micheli dijo que su hermana no tiene «absolutamente nada que ver» con el faltante de dinero y que le «falsificaron la firma» luego de su retiro del Ipauss. «Me donó el riñón y después se retiró. Acá el problema es conmigo, que denuncié en la OIT los manejos de la gobernadora», dijo el líder de la CTA. No hizo extensiva su defensa a Sánchez ni a Magaride, que «ni siquiera son parientes directos» de él.