El día viernes 20 de marzo del corriente, la Dirección de la Clínica Cruz del Sur tomó conocimiento que un médico de nuestro establecimiento viajó a Chile el 6 de marzo y regresó a nuestro país el 13 de marzo del corriente. Días después, el 16 de marzo, dicho médico comenzó la atención de consultorio sin haber informado la realización de dicho viaje.
Ante el mencionado anoticiamiento, la Dirección de la Clínica se comunicó de inmediato con las autoridades competentes para denunciar la situación y le informó al médico en cuestión que debía retirarse inmediatamente de la Clínica para cumplir con el aislamiento preventivo obligatorio, por ser persona proveniente de un país, como Chile, que presenta casos de COVID-19.
Asimismo se indicó al personal de la Clínica que tuvo contacto estrecho con el médico en cuestión, la realización del correspondiente aislamiento preventivo y se envió al Jugado Federal interviniente el listado de los pacientes que atendió dicho médico en su consultorio, a los fines del seguimiento epidemiológico de dichas personas.
Informamos además, para tranquilidad de la comunidad, que el médico no es caso sospechoso de COVID-19 al momento.
Repudiamos sin embargo la irresponsable conducta que tuvo el galeno, de ocultar el viaje a un país incluido en la lista de países considerados “de riesgo” y no haber por ende realizado la cuarentena obligatoria. A mayor razón, por su condición de médico, debió extremar los recaudos no sólo con respecto a los pacientes sino también respecto de sus colegas y personal sanitario de la Clínica abocado plenamente a esta emergencia sanitaria sin precedentes.
LA DIRECCIÓN