Las tensiones políticas en Bulgaria han aumentado significativamente en las últimas semanas, con protestas masivas contra la introducción del euro como moneda oficial. El partido de oposición nacionalista Vasrazhdane ha intensificado su campaña, pidiendo oficialmente una renegociación de la membresía de Bulgaria en la Unión Europea (UE) y un referéndum sobre la conservación de la moneda nacional, el lev.
Contexto de las protestas
- Sentimiento público contra el euro:
• Una encuesta reciente del Instituto Mjara revela que el 57,1 % de los búlgaros se opone a la introducción del euro, mientras que solo el 39 % lo apoya.
• A pesar de esta oposición mayoritaria, el gobierno búlgaro se ha comprometido a unirse a la eurozona en 2026 y ha rechazado la celebración de un referéndum sobre el tema. - Incidentes violentos:
• Las protestas, que comenzaron hace dos semanas, han sido marcadas por episodios de violencia, incluyendo el incendio de la representación de la UE en Sofía y ataques con bombas molotov y huevos. La policía ha reportado seis arrestos y diez agentes heridos durante estos incidentes. - Acciones del partido Vasrazhdane:
• El líder de Vasrazhdane, Kostadin Kostadinov, ha sido una figura central en las protestas, exigiendo un referéndum para mantener el lev y argumentando que la actual membresía en la UE no beneficia a Bulgaria.
• El partido ha recogido 604,000 firmas para solicitar un referéndum, pero el Parlamento búlgaro rechazó esta solicitud en 2023.
Reacciones políticas
• Respuesta de la UE:
• Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha expresado su indignación ante los recientes disturbios y ha calificado las escenas de “indignantes”.
• Demandas de renegociación:
• Vasrazhdane ha solicitado oficialmente al presidente búlgaro, Rumen Radev, que convoque un referéndum sobre la conservación del lev, subrayando la necesidad de una respuesta oficial del presidente sobre este tema.
Conclusión
Las protestas en Bulgaria reflejan un creciente descontento hacia la política económica del gobierno y la dirección de la integración europea. La oposición nacionalista está capitalizando este descontento, lo que podría tener implicaciones significativas para la estabilidad política y económica del país. El futuro de la membresía de Bulgaria en la UE y la introducción del euro permanece incierto, y la presión popular podría forzar al gobierno a reconsiderar su posición.
Este informe ofrece un análisis claro de la situación actual en Bulgaria respecto a las protestas contra el euro y las demandas políticas relacionadas.
