La presión ejercida por los Jubilados Unidos de la Provincia (JUP) hizo caer por tierra el endeble argumento del Ejecutivo y obligó a la Gobernadora a dar marcha atrás.
Tras depositar el sábado el 92% de los haberes, Alicia se comprometió a saldar hoy el total de esa deuda.
En tanto este viernes los pasivos llegarán a la Caja de Servicios Sociales (CSS) para conocer el destino de sus aportes desde el año 1991, momento en que esa institución fue intervenida.
Así lo adelantó ayer en diálogo con este medio Carlos Mc Namara, vocero de JUP.
El sábado, tras la presión ejercida por los pasivos, o mejor dicho por la razón de los pasivos, con la toma del edificio de la Caja de Previsión Social (CPS) el Gobierno decidió dar marcha atrás y depositó el 92% de los haberes jubilatorios, pese a haber argumentado horas antes que: “no había dinero en las arcas”.
Recordemos que el pasado viernes los jubilados denunciaron penalmente a la Gobernadora y al ministro de Economía, Juan Donnini por la comisión de los presuntos delitos de ‘Incumplimiento de los deberes de funcionario público’ y ‘Abandono de persona’; éste último por la no prestación de servicios en la CSS.
Si bien el Gobierno dio la razón a los demandantes al depositar los haberes, las causas seguirán su curso.
“Sabemos que la Justicia tiene sus tiempos y más que nada si la denunciada es la Gobernadora, pero esperaremos el resultado”, ironizó Mc Namara.
En base al segundo punto del reclamo, referido a la CSS, el vocero de los pasivos adelantó que el tema Salud se verá este viernes.
“Exigimos la normalización de la CSS, intervenida desde 1991”, relató Mc Namara. “Sabemos que los aportes patronales no se hacen desde aquel entonces y queremos saber qué pasó con esa millonada de pesos”, subrayó. “Han vaciado la CSS de la provincia”, disparó.
Por otra parte analizarán la intervención “porque hasta donde sabemos está fuera de lo legal”, dijo.
Comentó que estarán acompañados por gremios de la provincia en este pedido de rendición de cuentas.
Sin diálogo
Luego de reclamo del pasado viernes y tras la desacertada aparición en escena del presidente de la CPS, Roberto Ivovich quien encolerizado tildó de “oportunistas” a los pasivos, no hubo comunicación entre las partes.
“Nadie del Gobierno nos llamó –dijo Mc Namara- sabiendo muy bien que el problema es de ellos. Ivovich se expresó de manera violenta pero no es la única forma de violencia que nace desde el Gobierno de Santa Cruz”, enfatizó.
En medio del conflicto este fin de semana aparecieron los banquillos para el descanso de las partes.
El primer round, sin lugar a dudas fue para los JUP. Ahora resta esperar la reacción de Alicia Kirchner quien, complicada y contra las cuerdas, fue salvada por el campanazo del fin de semana.