violencia

Caleta Olivia
Las sedes del Partido Obrero y la filial provincial del gremio docente de ADOSAC, ambas en Río Gallegos amanecieron ayer con pintadas que generaron el repudio de sindicatos provinciales, nacionales y distintas organizaciones.
Otro hecho de “violencia” también se registró en Caleta Olivia con el “acampe” que realiza un minúsculo grupo de enfermeros del Hospital Zonal. Esta protesta también mereció el repudio de un grupo de personas que, manifestaron a Diario Más Prensa, sentirse “agredidos”.
Según denunciaron a este medio, “las personas que durante las 24 horas del día concurren a la guardia del Hospital Zonal (por urgencias o estados críticos, tanto de adultos como menores de edad) se encuentran con el sector ocupado por carpas, carteles y hasta reposeras”, sentenciaron y aseguraron que no están en contra del reclamo laboral, sino que critican “la metodología y el lugar”.

PO
En la capital provincial, el local del Partido Obrero amanecieron vandalizados con pintadas e insultos.
Miguel Del Plá declaró que la única explicación razonable es que “en el marco de la crisis que atraviesa la provincia, nuestra defensa de los derechos de los trabajadores incomoda al poder político”.
Del Plá llamó a la justicia a investigar y a dar con los responsables de estos ataques y afirmó “ratificamos nuestro compromiso con la lucha de los trabajadores de Santa Cruz y lejos de amedrentarnos, redobla nuestro esfuerzo. La mejor respuesta a estos cobardes ataques es unir a los trabajadores en el gran paro provincial que se prepara para el próximo 7 de junio”.

ADOSAC
Por su parte, el gremio docente emitió un documento en “repudio a la utilización de la violencia como respuesta institucional”.
“En relación con los lamentables hechos ocurridos en las últimas horas que son de público conocimiento, donde individuos amparados por la oscuridad y la impunidad otorgada desde poder, vandalizaron el frente de nuestra sede sindical, ADOSAC quiere señalar su más enérgico repudio a estas prácticas neofascistas y estrictamente reservadas a quienes no puede hacer uso del debate, el discurso y la razón para imponer sus ideas y utilizan como forma metodológica de exponer la carencia de recursos que tienen para resolver las crisis, la violencia, la discriminación y posteriormente, el silencio”, indica el texto y repudian “una vez más todo tipo de violencia y exponemos ante la opinión pública nuestra total convicción de que la paz y los acuerdos se logran mediando el debate”.