Caleta Olivia
En medio del escándalo por las supuestas coimas, el intendente Facundo Prades ordenó clausurar las oficinas y redacción de este medio.
El hecho ocurrió ayer por la mañana cuando dos personas que se presentaron como empleados de la Dirección de Comercio de la municipalidad que llegaron en un vehículo particular, pidieron ingresar y acceder a documentación.
Un detalle a tener en cuenta es que desde que salió a la luz el escándalo del aparente “cohecho” por la venta de terrenos a ciudadanos chinos, que salpica a la administración municipal, este medio mantuvo el seguimiento del caso.
Precisamente en la edición del diario de papel (diario Más Prensa) y en la digital (masprensa.com) se dedicó el titulo central de tapa a la situación judicial y al escenario institucional, mostrando la gravedad del hecho que aparentemente implica al intendente.
Fue en este contexto en que sorprendió la aparición de los inspectores de comercio, pero más sorprendente fueron las respuestas dadas luego por los funcionarios del área.

La inspección
Tras presentarse en las oficinas, de inmediato se les permitió el acceso a ingresar al edificio y comenzaron la inspección.
Así, luego de varios minutos pudieron comprobar que el local contaba con todos los elementos de seguridad en regla (matafuegos con certificación de Bomberos) salidas de emergencia señalizadas, además de botiquín e instalaciones sanitarias en perfectas condiciones.
Al solicitar la documentación sobre la habilitación se les informó que se encontraba en trámite de renovación mediante un expediente iniciado y que no estaba finalizado por los constantes paros de actividades que interrumpieron la tramitación.
De todos modos se les solicitó que aguardaran unos minutos a la llegada del director del medio quien les entregaría las copias de esta documentación.
Pero los inspectores se negaron a esperar (5 minutos) y dijeron que se debían retirar. Ante esto labraron un acta en la cual daban un plazo perentorio de 24 horas para presentar toda la documentación, y en caso de no cumplir con el requisito se clausurarían las instalaciones.
Vale apuntar que esta situación impediría que el personal administrativo y periodistas ingresen al edificio para cumplir con sus funciones y por lo tanto el diario Mas Prensa no podría salir a la calle.

El expediente
Pasadas las 11 de la mañana y luego de firmar el acta que redactaron los inspectores, la gerente del diario concurrió a las oficinas de la Dirección de Comercio, con “toda la documentación” además del “papel aforado” con el número de expediente y fecha de inicio del trámite.
Sorprendentemente, el expediente no estaba y la empleada municipal en comunicación – supuestamente con la directora o superior del área – informó que no solo el expediente no estaba, sino que además de haberse perdido o extraviado, podría haber quedado destruido en el incendio del archivo municipal ocurrido el año pasado.
Con lo cual había que iniciar todo el trámite nuevamente y en 24 horas presentar toda la documentación.
La evidente mala predisposición encontrada, tal vez al verse frustrados por la imposibilidad de clausurar el medio, no impedirá que hoy personal del diario se presente para cumplir con lo requerido.

Sospechoso
Otro dato a tener en cuenta es que en la fotografía de tapa– una imagen capturada del video que muestra el pago de la supuesta coima – se veía el “videograph” o “zócalo” que colocaba el canal de Noticias TN; subtitulando la conversación de Prades con Fermin Valdivia, en el preciso momento en el que el intendente mencionaba a un tal “Marcos”.
Casualmente el Secretario de Hacienda de la comuna es Marcos Antonelli, y de esa dependencia dependería el área de Comercio, que ayer recibió la orden de inspeccionar y clausurar a nuestro diario.
También es sospechoso cómo algunos trámites avanzaron pese a la huelga municipal – como la venta de terrenos a los chinos – y otros no como el expediente de habilitación del diario.

Un debate pendiente
Una inspección sorpresiva, un expediente desaparecido o incluso destruido, plazos perentorios casi “incumplibles”, todo es sospechoso en este procedimiento.
No obstante es necesario aclarar que el Diario Más Prensa, es una empresa radicada en la ciudad, que cuenta con domicilio legal y además de ser contribuyente municipal tributa impuestos.
No sería el caso de muchos denominados “sitios” de información, o “diarios digitales” de la localidad que carecen no solo de oficinas o espacio físico o que sean posibles de ser inspeccionados, o más aún habilitados comercialmente. De este modo, este medio no solo enfrenta algo similar a lo que debe afrontar cualquier comercio local, ante la venta ilegal callejera, que carece de controles, no paga impuestos y en esa informalidad compite deslealmente.
Peor aún, muchos de esos sitios no habilitados y sin responsabilidades legales aparentes, reciben dinero, publicidad o pauta oficial, con lo cual el Estado provincial o municipal los financia.
Incluso se puede ver publicidad de campaña de candidatos que dicen buscar la transparencia del estado, tal el caso de la campaña del candidato a senador Carlos Alfonso Prades, que desde el inicio de su campaña usó a la dirección de prensa Municipal para dar a conocer actos de proselitismo.
Más allá, este medio ratifica su compromiso de trabajar sin condicionamientos y en libertad, generando un espacio para todos los sectores y esto lo pueden ratificar nuestros lectores. Esto gracias al esfuerzo y el apoyo del sector privado que pauta y publicita en nuestro medio y nos permite mantenernos sin recibir pauta del Estado.
Claramente la maniobra buscó afectar esta libertad, dado que el medio es sustentado por los avisos privados y por la venta del diario de papel, y de ser cerrado el medio, logran interrumpir sus ingresos para desfinanciar al medio.