Río Gallegos
La chilena Enap; CGC, de Eurnekian; y Roch prevén ampliar la producción de petróleo y gas en la Cuenca Austral y desarrollar la actividad en el mar, más cara que en tierra.
Después de más de cuatro meses de negociaciones, el viernes pasado se firmó la adecuación a los convenios colectivos de trabajo (CCT) para extraer hidrocarburos no convencionales en el sur de Santa Cruz, un modelo imitado de la adenda laboral acordada en enero para Vaca Muerta.
La intención es sumar producción con moderados costos, teniendo en cuenta que buena parte de la actividad sería offshore (en el mar), donde poner una plataforma y tener al personal disponible es mucho más caro que en tierra.
Como consignó El Cronista en su edición del 25 de mayo, el Ministerio de Energía buscaba la concreción de este acuerdo en un “Marco de Entendimiento para la Sustentabilidad de la Industria Hidrocarburífera” para hacer rentable la producción en la Cuenca Austral, que podría sumar más gas a lo que se espera de Vaca Muerta (la estrella nacional).
De este modo, el viernes consiguió la firma de la chilena Enap Sipetrol, CGC (del grupo Corporación América, de Eduardo Eurnekian) y Roch por el lado de las empresas y del recientemente reelecto Claudio Vidal, Marcelo Turchetti, Pedro Luxen y José Lludgar por la parte sindical.
El documento final tiene 27 páginas, 6 capítulos, 37 artículos y un anexo. Allí se adaptaron los CCT 643/2012 (trabajadores petroleros privados en el continente y costa afuera) y 611/2010 (personal jerárquico) y se ratifica el compromiso de alcanzar “un nivel de eficiencia y productividad acorde con los niveles de inversión requeridos”.
La vigencia es por dos años y tres meses antes de que termine, habrá reuniones para evaluar los resultados.
Adenda
Algunos de los puntos más importantes de la adenda son los que establecen la creación de una Comisión Especial de Interpretación y Resolución de Conflictos (CEI), que intervendrá en cuestiones derivadas de la aplicación y servirá para abrir negociaciones en caso de conflictos, previo al inicio de acciones directas como huelga, trabajo a reglamento y quita de colaboración.
En ese mismo sentido, se garantiza la “libre circulación y acceso a las instalaciones durante el período en que se desarrolle la medida de acción directa”, para evitar bloqueos en el ingreso a las plataformas y rutas en el continente.
El personal de una dotación podrá realizar tareas de otro equipo si tiene los conocimientos; para eso, las compañías tendrán planes de capacitación. Para ganar en productividad, “las reuniones informativas o asambleas organizadas por los representantes gremiales, salvo casos que respondan a causas de extrema urgencia, serán programadas a la finalización de los turnos”.
Por el lado gremial, se eximirá del Impuesto a las Ganancias el equivalente a la incidencia del Diferencial por Zona. Las horas de traslado al lugar de trabajo no serán abonadas porque no integran la jornada laboral, pero sí se pagará el traslado del lugar de trabajo al de descanso.
Para Vidal, la adenda sumará trabajadores. Según Enap Sipetrol, habrá en 2018 una inversión de u$s 250 millones y un aumento de producción del 60%.
Además, la firma chilena explorará en El Turbio Este, con u$s 47 millones.
“Esta adenda, lograda como consecuencia del diálogo que promueve el Gobierno nacional, afecta a todo el territorio continental y marítimo de Santa Cruz y confirma el camino iniciado en la Cuenca Neuquina, continuado por Chubut, y marca el rumbo para la actividad. Demuestra que los actores de la industria comparten un diagnóstico común: por un lado, incrementar la productividad y competitividad reduciendo los costos, así como también incrementar el nivel de inversiones que permita consolidar el desarrollo de los recursos”, celebró Energía en un comunicado.