Caleta Olivia
A pesar que las elecciones se desarrollarán el 15 de diciembre y aún no se ha conformado la Junta Electoral del Sindicato Obreros y Empleados Municipales de ésta ciudad, Julián Carrizo ya lanzó su campaña con “promesas inusuales”.
El actual secretario general del SOEMCO va en busca de su sexta gestión consecutiva: lleva más de 20 años al frente del gremio y al parecer pretende repetir el título.
En los últimos días, los trabajadores municipales se mostraron sorprendidos por las declaraciones del dirigente, quien aseguró que negocia recategorizaciones para toda la planta municipal.
Hace un mes atrás, en plena gestión con autoridades de la provincia en la búsqueda de fondos para el pago de salarios, el dirigente aseguraba que “no existían posibilidades de aumento salarial, ni mucho menos de poder recategorizar”. Hoy el discurso es otro.
“De dónde saldrá la plata para pagar a todo el personal?” Se preguntan sectores discidentes, quienes además aseguran que para hacer frente a esa promesa se necesitarán, al menor siete millones de pesos más.
Actualmente la municipalidad vive un “calvario” para conseguir fondos y poder hacer frente al pago de los sueldos.
“De dónde va a sacar plata la municipalidad para pagar los aumentos”, señalaron a Diario Más Prensa y aseveraron que “no se pueden hacer promesas vacías. Recategorizar en masa es suicidarse”, indicaron.
En las redes
Mientras el conflicto municipal se extiende sectores de trabajadores municipales que discrepan con la actual gestion gremial afirman que “ya no se puede mentir más. Llegan elecciones y empiezan con las promesas. Si Julián promete recategorizar, porqué como actual dirigente no pelea por un aumento salarial?”, señalaron y recordaron que “hasta promete que van a entregar viviendas a los trabajadores”.
En los últimos días también trascendió que se están convocando por las redes sociales a los empleados municipales para “ir a trabajar” a la agrupación de Julián Carrizo. La promesa es trabajar seis horas de lunes a viernes y el beneficio será recategorizar a quien se inscriba.
Al parecer, el secretario general cuenta con la anuencia de la comuna, teniendo en cuenta que ningún funcionario salió al cruce de sus declaraciones. “Nadie del ejecutivo salió a trasparentar la situación. Hoy no puede hacer frente al pago en tiempo y forma de los salarios y ahora tanto la comuna, como el gremio juegan con las necesidades de la gente”, manifestaron.