Washington
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quería aumentar de forma dramática el arsenal nuclear de su país, según afirmó en una reunión con sus asesores de seguridad nacional en julio, reportó NBC News el miércoles, citando a tres funcionarios presentes en el encuentro.
Los supuestos comentarios de Trump se produjeron en un momento de alta tensión con Corea del Norte y antes de un previsible anuncio sobre si descertifica el acuerdo internacional firmado con grandes potencias mundiales para frenar las aspiraciones nucleares de Irán.
El mandatario habló en julio después de que se le mostró un gráfico que indicaba que el arsenal de armas nucleares de Estados Unidos había bajado desde un máximo de 32.000 en los años 60. Trump aseguró que le gustaría tener el mismo número ahora, informó NBC. Estados Unidos tiene en la actualidad unas 4.000 ojivas nucleares listas para ser usadas en su arsenal militar, según la Federación de Científicos Estadounidenses.
En un mensaje publicado el miércoles en Twitter, el presidente dijo “Falso @NBCNews inventó una historia de que quería un incremento ‘por diez’ de nuestro arsenal nuclear. Pura ficción, inventado para menospreciar. ¡NBC = CNN!”.
Aunque los presidentes estadounidenses han modernizado sus reservas de armas a lo largo de los años, aumentar el arsenal nuclear o construir un tipo de arma prohibida sería una violación de los tratados internacionales, según NBC.
Tras la reunión, el secretario de Estado, Rex Tillerson, se refirió a Trump como un “idiota”, de acuerdo a NBC. Los medios estadounidenses califican la relación entre ambos como tensa.
En Corea
Ayer aviones B1B realizaron simulacros de bombardeo sobre objetivos terrestres con dos cazas F-15 de las fuerzas aéreas surcoreanas, según anticipó un portavoz del Ministerio de Defensa en Seúl.
Dos bombarderos estratégicos estadounidenses realizaron maniobras en la península coreana luego de que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, volvió a recalentar la escalada entre Washington y Pyongyang al insistir en que se agotaron las instancias de diálogo para resolver la crisis en la región, se informó.
Los aviones B1B realizaron simulacros de bombardeo sobre objetivos terrestres con dos cazas F-15 de las fuerzas aéreas surcoreanas, según anticipó un portavoz del Ministerio de Defensa en Seúl y posteriormente confirmó la Fuerza Aérea norteamericana.
El ejercicio “regular” y “disuasorio”, como lo describieron desde Seúl, se llevó a cabo ayer sobre el Mar de Japón (llamado Mar del Este en las dos Coreas) y sobre el Mar Amarillo (Mar del Oeste), donde una vez terminado el ejercicio los bombarderos estadounidenses retornaron a la base en la isla de Guam.