Río Gallegos
El Tribunal de Cuentas realizó una intervención y pedido de informes con respecto a la Licitación Pública 28/2016 referida al Nuevo Edificio de la ASIP -Agencia Santacruceña de Ingresos Públicos cuya sede se encuentra en la ciudad de Río Gallegos.
El Tribunal realizó diversas observaciones, pedidos de aclaraciones y documentos al IDUV- Instituto de Desarrollo Urbano y Vivienda-.
Las mismas giran en torno a importantes modificaciones del proyecto original, que implicó sustituir el sistema de construcción tradicional por el sistema de construcción en seco bajo la justificación de haberse advertido que el terreno donde se asienta la obra, es “una arcilla blanda y de muy baja capacidad portante”.
La cuestión pasa, esencialmente, por determinar si se avanzó sobre la licitación de una obra cercana a los 40 millones de pesos sin contar con los estudios previos sobre el suelo, o por qué motivo no se realizaron; pero a la vez, esclarecer de qué modo impacta en el presupuesto la modificación del sistema constructivo, si estamos o no ante una obra nueva y si en definitiva, no fue afectada la igualdad de los oferentes al momento de presentar su cotización, en tanto que los presupuestos presentados fueron, en definitiva, para una obra distinta a la que hoy se estaría ejecutando.
Interrogantes
Ante ello, también surgieron interrogantes sobre si el organismo que preside Pablo Grasso realizó el estudio de suelos previo al llamado a la Licitación, o si la misma empresa lo realizó previo a realizar la oferta.
Consultado sobre el tema, Stoessel expresó que los requerimientos se efectuaron a partir de un informe de la auditoría delegada dependiente de la Vocalía de Entes Descentralizados, ante lo cual se “requirió al IDUV toda la documentación que respalde y justifique los cambios en el sistema de construcción teniendo en cuenta que pueden impactar en el presupuesto de modo más que importante, debiéndose analizar igualmente sino ha sido afectada la libre concurrencia y el principio de transparencia; en tanto que las dificultades técnicas debían surgir de los estudios preliminares que indica el mismo pliego de condiciones”.