Caleta Olivia
Por una resolución del Jurado de Enjuiciamiento del 21 de mayo ,fueron “suspendidos preventivamente”, los funcionarios involucrados en el caso de adopción de una beba en la ciudad de Caleta Olivia.
Los funcionarios son la Dra. Maria del Rosario Álvarez (Juzgado de Familia); la Dra. Angelica Popis Zari (Juzgado del Menor) y Dr. Walter Martínez (Defensor Oficial).
Con la doctora Malena Totino, podría suceder lo mismo, una vez que se reincorpore en sus funciones.
El Tribunal de Enjuiciamiento está presidido por la Dra. Reneé G. Fernandez y son vocales,el Dr. José Blassiotto y la Dra. Florencia Moreira .
La situación que originó esta investigación tomo estado publico e intervino el Estado Provincial al ser investigadas tres juezas en Caleta Olivia por la adopción de una beba recién nacida.
El proceso de investigación se inició por una nota escrita por la periodista Sara Delgado y publicada en la revista “Cosecha Roja”, que hacía mención a una presunta “adopción ilegal” que involucraba a tres jueces del fuero local y a la Directora del Hospital Zonal de Caleta Olivia.
Caso
En la nota periodística relata que Laura estaba llegando al fin de su embarazo cuando la internaron en la Clínica Cruz del Sur de Caleta Olivia.
La mujer ya había dicho que no quería quedarse con la beba. En el Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos había más de setenta familias en condiciones de pedir la adopción. Con la ayuda de dos colegas la jueza del Menor Angélica Popis Zari salteó todos los pasos que establece la ley y consiguió la adopción de la beba: ahora el Estado santacruceño investiga a las tres juezas y la directora del hospital público y reclama la nulidad de todo el proceso.
No se sabe si previamente Laura -no es su nombre verdadero- acordó la adopción con la jueza Zari. Lo único que pidió cuando quedó internada es que le dejaran sacarse una foto con la beba después del parto. Laura fue derivada al hospital público de Caleta Olivia, cuya directora es Patricia Zari, hermana de la jueza del menor.
El 14 de febrero desde el Juzgado de Familia , a cargo de María del Rosario Álvarez, enviaron un oficio al hospital: avisaron que el embarazo “era de alto riesgo” y que la mujer ya había manifestado “expresamente” su voluntad de dar en adopción a la beba por nacer. Así, se aseguraron que desde el hospital le informaran de manera “urgente y prioritaria” del parto. Además, la beba quedaría “a disposición” de ese juzgado.
El nuevo Código Civil cambió los principios en los que se basa la adopción, poniendo en la centralidad el derecho de los niños, niñas y adolescentes a tener una familia y no en el deseo de los padres a tener un hijo.
El Juzgado de Familia debió haber dado intervención a la Oficina de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes de Caleta Olivia, pero no lo hizo. La adopción, al menos hasta acá, no había sido incorporada al sistema.
La beba nació el 22 de febrero al mediodía. La identificaron con el nombre que eligió Laura, pero en la cuna agregaron un rótulo con otro apellido. En el certificado de nacimiento, en vez de su identidad, anotaron un número de celular.
Los primeros días de marzo el Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos recibió un nuevo legajo para la inscripción de una familia de Caleta Olivia conformada por la jueza del menor, Angélica Zari, en el que ya constaban los procedimientos de evaluaciones psicológicas y sociales que se hacen en el Poder Judicial. Llamó la atención la celeridad que tuvo ese trámite que en vez de tardar dos meses promedio como generalmente sucede, se hizo en 48 horas.