La Comisión de Fomento de Cañadón Seco destinó 592 mil pesos de sus propios recursos para refaccionar la antigua vivienda del Correo Argentino ubicada junto a las oficinas de la sucursal y que en su conjunto forman parte del patrimonio histórico de la localidad, en la esquina de las calles Barrancas y Medanitos.
La estructura de madera se encontraba en deplorables condiciones y ya no era habitable para que pudiera alojarse el nuevo encargado de la sucursal, Marcos Echenique y su grupo familiar.
El mismo reside en Pico Truncado y se traslada diariamente para cumplir con su trabajo hasta Cañadón Seco, pero en no pocas ocasiones le fue imposible hacerlo, inicialmente por las restricciones de circulación que impuso la pandemia del Coronavirus, en otras por piquetes que bloqueaban la Ruta 12 en el acceso a su localidad o bien por cuestiones familiares, por lo cual la oficina quedaba cerrada al público.
Para resolver esta problemática, a fin de que no se interrumpiera la prestación de un servicio público, el presidente de la comuna, Jorge Soloaga, acordó con el Correo Argentino, hacerse cargo de las refacciones que no solo incluyeron trabajos de acondicionamiento de las paredes, techo, pintura interior y exterior y renovación de parte de las instalaciones de electricidad, gas y agua, sino que también se proveyó un nuevo sanitario, cocina y termo-tanque.
A mediodía de este viernes se concretó la entrega formal de los trabajos que estuvieron a cargo de personal de la propia comuna, lo cual permitió abaratar costos
Al respecto, acompañado por varios integrantes de su equipo de gestión, Soloaga comentó que se respetó la fisonomía original de la vivienda en la que residirá el empleado del Correo designado por la delegación Pico Truncado.
“Nosotros tomamos la responsabilidad de realizar un acuerdo con las autoridades del organismo de nivel nacional y nos encargamos de poner la vivienda en condiciones de habitabilidad digna” dijo el jefe comunal, aclarando que toda la estructura de la sucursal no está comprendida dentro de la jurisdicción de la institución comunal porque, de lo contrario, hubiera sido reemplazada por un moderno edificio.
“Pero más allá del significado histórico que estas instalaciones representan, hemos tratado de que sean seguras y cómodas para quien va a ser uso de las mismas. Además -acotó- los trabajos fueron realizados por administración don personal del área de Servicios, por lo cual los costos fueron significativamente menores a los valores que representarían hacerlos mediante una licitación pública”.
Finamente puso de relieve que la inversión realizada permitirá asegurar el servicio público de correspondencia y encomiendas no solo para los vecinos, sino también a empresas asentadas en la zona, instituciones e incluso a propietarios de varias estancias que utilizan esta sucursal.