Lo hizo por la compra de trenes chatarra a España y Portugal. En la causa también fue condenado Manuel Vázquez supuesto testaferro de Jaime.
La decisión fue tomada por el Tribunal Oral Federal 6. El exsecretario de Transporte del kirchnerismo Ricardo Jaime fue condenado a ocho años de cárcel por enriquecimiento ilícito y por la compra de trenes chatarra a España y Portugal. En tanto que al exministro de Planificación Julio De Vido se le impuso una condena de cuatro años de prisión.
La decisión fue tomada por unanimidad por el Tribunal Oral Federal 6, integrado por los jueces Fernando Canero, Julio Panelo y Ricardo Basílico. Los fundamentos de la sentencia serán difundidos el 6 de junio.
Cuando la semana pasada tuvo la oportunidad de decir sus últimas palabras, Jaime se negó a hacerlo porque el tribunal no le permitió hacerlo de manera presencial. El proceso comenzó en abril de 2019. Y el tribunal que lo llevó adelante sufrió un cambio hace dos meses, cuando uno de los jueces que lo integraba, José Martínez Sobrino, se apartó por haber cumplido los 75 años. Ese cambio motivó planteos de las defensas, que buscaron sin éxito que todo lo actuado en el juicio fuera declarado nulo. La fiscal del juicio fue Cecilia Baigún. El caso en primera instancia estuvo a cargo del juez Julián Ercolini y del fiscal Guillermo Marijuan.
En noviembre pasado, Baigún había pedido condenar a Julio De Vido a cuatro años de prisión por haber defraudado al Estado con la compra de trenes chatarra, y había solicitado que a Ricardo Jaime se le aplicara una pena de ocho años de cárcel y una multa de 15.860.336 pesos por ese fraude, por enriquecimiento ilícito y por otra defraudación vinculada con el tren Belgrano Cargas.
Perjuicio patrimonial
El juicio contra Jaime fue por enriquecimiento ilícito pero también abarcó otros hechos, como esta operación ferroviaria donde están acusados en particular De Vido y Manuel Vázquez. Baigún dijo que De Vido, Jaime, y Vázquez -jefe de asesores del ministerio y supuesto testaferro de Jaime- compraron los trenes a España y Portugal violando sus deberes como funcionarios, comprometiendo al Estado de manera abusiva y provocando un perjuicio patrimonial irreversible.
Según la acusación, los trenes adquiridos, en algunos casos, eran incompatibles con la red ferroviaria, y que en su mayoría en el año 2015 el material comprado estaba tirado, sin posibilidad de ser reparado, abandonado y con vegetación que había cubierto el interior y exterior de los coches y las ruedas. La fiscalía exhibió estas fotos durante el juicio.
Por la tragedia ferroviaria de Once, Jaime fue excarcelado, luego de que la Corte le abriera un recurso de queja para revisar su condena. La prisión preventiva que todavía lo mantiene tras las rejas en el Penal de Ezeiza es la que se le dictó en la causa de los cuadernos de las coimas.
Esta es la cuarta condena que recibe Ricardo Jaime. El exsecretario de Transporte fue sentenciado a seis meses de prisión en suspenso por la sustracción de pruebas; a un año y dos meses de prisión por recibir dádivas en un juicio abreviado en el que acordó esa pena con el fiscal, y finalmente la condena a 5 años de cárcel por administración fraudulenta por la tragedia de Once. Pero esa condena fue elevada a 8 años cuando la Casación revisó el caso y lo condenó por estrago también. Jaime fue a la Corte porque dijo que ese aumento de pena no tuvo doble conforme, sino que solo fue decidido por la Casación. El máximo tribunal le dio la razón y mandó a revisar ese aumento de pena por otra sala de Casación.