El Presidente de la Comisión de Fomento de Cañadón Seco formuló tal expresión durante el acto convocado por el PJ de esta localidad para repudiar el intento de magnicidio contra Cristina Fernández de Kirchner.
La dijo en el cierre del efusivo discurso que pronunció en la ventosa tarde noche del viernes, ante más de doscientos vecinos -entre ellos numerosos jóvenes- que se concentraron frente a la rotonda en la que luce la estatua de Néstor Kirchner.
En principio señaló que al igual que en otros pueblos y ciudades del extenso territorio argentino, la comunidad de Cañadón Seco se vio conmovida por el atentado que de manera evidente fue pergeñado por personajes de la oligarquía que concentran la riqueza, algo que deviene del fondo de la historia de nuestra patria.
En tal sentido resaltó que “son los que siempre han pretendido el aplastamiento de los sectores populares” y citó como ejemplo la acusación que sufrió el propio General José San Martín cuando lo trataron de chorro y corrupto “y lo obligaron a exiliarse de la patria que él mismo había defendido”.
“Esto también lo hicieron con Belgrano, con Güemes, con Dorrego y con Rosas, al que derrotaron en la batalla de Caseros con el acompañamiento de los ingleses, los portugueses y miembros de las milicias brasileñas, es decir que los acusadores pertenecieron al mismo sector de los que ahora quieren apropiarse del esfuerzo de un pueblo”, afirmó.
“Son los mismos que siempre hablan de muerte, de aplastar al otro, al que lucha por reivindicaciones en materia de justicia y dignidad en la Argentina y por eso tampoco tenemos que olvidarnos de Sarmiento, un invento de prócer de barro quien dijo que no había que ahorrar sangre de negros, gauchos, indios o mulatos porque esa sangre no servía ni para abonar esta tierra”.
Personajes de tiempos recientes y actuales
Luego, al hacer referencia a tiempos más recientes, aludió al histórico 17 de Octubre de 1945 cuando una masa de obreros, liderados por Evita invadió la Plaza de Mayo para exigir la libertad de Juan Domingo Perón.
Rememoró además que los oligarcas de entonces ironizaron a ese movimiento popular tildándolo peyorativamente de “aluvión zoológico” conformado por “cabecitas negras que venían a lavarse las patas en las fuentes afrancesadas de la plaza y llenar de olor nauseabundo las privilegiadas calles porteñas”.
“Y hoy esos personajes está representados entre otros por la carnicera de Juntos por el Cambio (Patricia) Bullrich que dice que si no condenan a Cristina este país va a ser un infierno”.
“También están representados por la Carrió, a la que llaman Lilita como si fuera una figura inocente e infantil, cuando en realidad es un personaje malicioso y perverso en la política de los tiempos que corren porque –recordó- fue quien proclamaba que a los kirchneristas el pueblo los quería matar y lo decía en esos canales de televisión que son los instrumentos que tiene la oligarquía para transmitir el odio y la violencia”.
A la lista sumó el nombre “el imbécil diputado neuquino (Francisco Sánchez del PRO) que muy suelto de cuerpo presentó un proyecto planteando la pena de muerte para este juicio mentiroso y repugnante que le plantaron a la vicepresidenta de la Nación, una de las líderes más trascendentes en la vida de la política nacional de estos tiempos”.
Patria o Colonia
Más adelante puso de relieve que “hay algo que los argentinos bien nacidos no podemos perder de vista en nuestra escala de valores comprometidos con nuestra vida institucional, política y democrática y es lo que nos señaló el General Perón: primero está la patria, después el movimiento y por último los hombres”.
“Esas son las consignas centrales que tenemos que tener en claro, sobre todo en estos tiempos que pretenden romper la vida institucional”, afirmó.
“Ellos, los perversos, juegan a fondo y por ello me atrevo a decir públicamente que hoy no es tiempo de tibios y blandengues y a las cosas hay que llamarlas por su nombre ya que lo blanco es blanco y lo negro es negro. No nos sirven los grises, como tampoco nos sirven los dirigentes que se hacen los pelotudos a la hora de decir las cosas como hay que decirlas para defender los intereses de nuestra gente”, vociferó.
En el tramo final de su discurso, Soloaga sostuvo que ante lo sucedido con Cristina Fernández de Kirchner, “es un error crucial grave quedarse con los brazos cruzados” porque la lucha “no es solamente hoy sino siempre, por los derechos y una justicia social que garantice la felicidad y la grandeza de hombres y mujeres que viven en esta patria”.
“Por eso, a pecho abierto siempre señalamos que hay que respaldar a la democracia, a la política, la vida republicana y al estado de derecho” puntualizó, advirtiendo al mismo tiempo que igualmente “tenemos que permanecer alertas y movilizados porque está en juego el destino de la Argentina” ya que en esta lucha prevalecerá el pueblo y la patria o bien la oligarquía y el sistema colonial.