El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) confirmó este jueves que la aceleración de la inflación en septiembre fue incluso mayor a la prevista por los analistas privados y porque los precios avanzaron 12,7% y acumularon un salto interanual (i.a.) de 138,3%. Los guarismos grafican la compleja situación económica y social que determinará el pronunciamiento en las elecciones presidenciales del próximo domingo 22 de octubre.
Según precisó el organismo oficial que conduce el economista Marco Lavagna, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) corre con un incremento del 103,2% en los primeros nueve meses del año. Y, de nuevo, el segmento de “Alimentos y bebidas no alcohólicas” fue uno de los que más aumentó, que terminaron en un promedio del 14,3%.
La inflación de septiembre superó el resultado récord de agosto, cuando el IPC se ubicó en el 12,4%. Justamente el recalentamiento de los precios se apuntaló en la devaluación que aplicó el gobierno nacional tras las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO).
En el informe de septiembre se indicó que la división de mayor aumento en el mes fue “Prendas de vestir y calzado” (15,7%), impulsada por el cambio de temporada, y que le siguieron “Recreación y cultura (15,1%)”, principalmente por la suba en los servicios de televisión por cable, y “Alimentos y bebidas no alcohólicas”.
“La división con mayor incidencia en todas las regiones fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (14,3%). Al interior de la división impactó la suba de Carnes y derivados, Pan y cereales y Frutas”, señaló el Indec.
El 12,7% de septiembre surge del promedio nacional, pero en algunos territorios del país el salto fue mucho mayor: 14% en la Patagonia, 13,7% en Cuyo; 13,2% en el Noroeste, 13,1 en la región Pampeana, 13% en el Noreste, y 12,2% en el Gran Buenos Aires.
Los guarismos superaron todas las proyecciones privadas y también aquellas que coordina el Banco Central de la República Argentina (BCRA) con su Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM). En la última edición de ese informe (correspondiente a agosto), los analistas estimaron una inflación mensual de 12,0% para septiembre y una inflación para todo el año de 169,3% i.a. (28,6 puntos porcentuales más que la encuesta previa).
Los últimos datos del Indec confirman que el drama económico se agravó al igual que sus efectos sociales: la carrera de los precios carcomió el poder adquisitivo e instaló el fenómeno de los “trabajadores pobres”, tal como lo definió la vicepresidenta Cristina Kirchner.
La incapacidad para torcer el complejo escenario acorrala al candidato a presidente por la coalición oficialista Unión por la Patria (UP), Sergio Massa. El también ministro de Economía, luego de cerrar las renegociaciones con el FMI para garantizar la llegada de los desembolsos hasta fines de este mes, impulsó una serie de acciones para tratar de recomponer el poder adquisitivo y compensar el impacto de la devaluación posterior a las PASO.
Pero las medidas se convirtieron en un arma de doble filo para Massa, porque la oposición no tardó en definirlas como el “plan platita” para tratar de sumar votos frente al tercer puesto en el que quedó el oficialismo en las primarias, detrás de Patricia Bullrich (Juntos por el Cambio) y lejos de Javier Milei (La Libertad Avanza).
Mientras, la crisis por la escasez de dólares agravó las condiciones y en el mercado consideran que el gobierno deberá profundizar la devaluación para tratar de garantizar cierto equilibrio. En los últimos días se avanzó en ese sentido, a través de la unificación de algunos tipos de cambio, pero la plaza cambiaria volvió temblar y la incertidumbre nuevamente se materializó a través del informal dólar Blue que llegó a venderse a 1060 pesos, aunque terminó la semana 980 pesos.
La inflación constituye el principal problema para quien asuma la conducción del Gobierno nacional a partir del 10 de diciembre, sobre todo, porque promovió el crecimiento de los niveles de pobreza, que ya afecta al 40,1% de la población y al 56,2% de los niños, según los registros del primer semestre de 2023.
Expectativas
“La devaluación impactó de lleno en la inflación de agosto, pero también dejó un arrastre para septiembre, por lo que sus efectos se seguirán sintiendo a pesar de una desaceleración de la inflación semanal hacia finales de mes. Por otro lado, septiembre vino acompañado de subas de precios regulados como colegios, combustibles y prepagas”, detalló la consultora LCG.
“En este contexto, de acuerdo con la inflación declarada por la Secretaría de Política Económica, septiembre se sostendría por encima de los dos dígitos mensuales. Nuestra estimación la ubica cercana al 12% mensual, consistente con un 136% anual”, habían advertido.