Además, los precios del arriendo en la capital están bajando entre un 15% y un 35%.
La derogación de la Ley de Alquileres ha empezado a provocar un vuelco muy positivo en el mercado inmobiliario argentino. La decisión adoptada por Javier Milei en su primer mes de mandato ha tenido un efecto inmediato en la oferta de alquiler, que se habría disparado en Buenos Aires. Además, el precio medio de los arriendos ha experimentado un descenso significativo, de acuerdo con los principales operadores del sector.
Como es lógico, aún es demasiado pronto para que la eliminación de la Ley de Alquileres arroje todos los resultados que espera el nuevo gobierno comandado por el libertario Javier Milei, pero la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA) ha querido avanzar los resultados preliminares que ya se han venido observando en el mercado de Buenos Aires.
Así, las cifras compartidas por la CIA señalan que el parque de vivienda disponible en la ciudad bonaerense se ha duplicado a lo largo de las últimas semanas, tal y como recoge el diario argentino El Cronista. La organización recuerda que el número de pisos disponibles para alquilar cayó con fuerza en los últimos años, merced a los controles de precios y otras medidas intervencionistas impulsadas por el gobierno peronista del ex mandatario, Alberto Fernández.
Sin embargo, esta tendencia se habría invertido con relativa rapidez a partir del mes de diciembre. De hecho, las informaciones que maneja la patronal sectorial apuntan que el stock de casas disponibles para el arriendo en la capital del país han subido hasta superar el umbral de las 800.000 unidades. Un prometedor desarrollo que ya se traslada a los precios.
Así, El Cronista recoge informaciones de distintos operadores inmobiliarios que hablan de una corrección a la baja del 20% o 30% en los precios de alquiler disponibles a comienzos de año, en relación con los de noviembre o el propio mes de diciembre. Si se ajustan los datos para estimar el promedio de noviembre-diciembre y medirlo contra los datos de enero, el descenso se sitúa en el entorno del 15%.
De igual modo, la información compartida por El Cronista señala que los contratos que recogen un año de pago anual anticipado están negociándose con un descuento aún mayor, situado en torno al 35% en algunos de los acuerdos formalizados durante los últimos días.
Otro de los cambios que han venido registrando los operadores es el paso a contratos formalizados en dólares y no en euros, puesto que el nuevo tipo de cambio anunciado por el Banco Central cierra la brecha artificial que se había mantenido durante años a la hora de ponerle un precio a un peso que, en la práctica, tenía un valor relativo a la moneda estadounidense mucho más bajo de lo que pretendían transmitir las cifras oficiales. Bajo el nuevo marco, 6 de cada 10 acuerdos se cierran en pesos.