La producción en la industria manufacturera pyme experimentó una abrupta caída de 26,9% en diciembre, a precios constantes, y finalizó 2023 con una baja de 2,6%. En la comparación mensual, la actividad industrial también sufrió una retracción acentuada, que alcanzó al 31,7%.
La significativa depreciación de la moneda, la escalada de la inflación posterior a las elecciones y los cambios en las regulaciones de importación, que impidieron realizar compras durante algunas semanas, entre otras cuestiones, crearon un entorno marcado por la elevada incertidumbre y la disminución del consumo, factores que obstaculizaron los niveles de producción en el conjunto del sector manufacturero. Además, se experimentaron períodos sin cotizaciones, con tasas elevadas de escasez de insumos, lo que llevó a que numerosas empresas suspendieran operaciones durante algunos días o adelantaran las vacaciones de su personal.
Durante este mes, las empresas operaron con el 73,1% de su capacidad instalada, casi en los mismos niveles de noviembre (73,3%). La estabilidad de esa variable en medio de una caída tan profunda se debe, en parte, a la salida del proceso productivo de algunas maquinarias sin repuestos disponibles, y al achicamiento de unidades de negocios frente a la expectativa de un futuro recesivo.
En diciembre, el 53,4% de las empresas reportó dificultades para reponer stocks, especialmente en la obtención de materias primas e insumos.
Estos resultados surgen del Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) que elabora CAME, con una muestra que alcanzó a 410 industrias pyme a nivel federal.
Análisis sectorial
La peor performance de diciembre la tuvo “Metálicos, maquinarias, equipos y material de transporte”, con una baja anual de 35,7% en su producción, a precios constantes, seguida por “Maderas y muebles” (-34,4%).
En el acumulado del año, la mejor performance sectorial estuvo en “Textil e Indumentaria”, con un alza de 3,3% frente al período enero-diciembre de 2022. La peor correspondió a “Papel e impresiones” con una caída del 16,7%.
Alimentos y bebidas
La producción bajó 15,2% anual a precios constantes en diciembre, pero cerró el año con un alza de 2,9%. En la variación mensual se retrajo 21,4%. En el último mes de 2023 las industrias operaron con 75,8% de su capacidad instalada, por encima de noviembre (72,7%).
Fue un diciembre marcado por subas en todos los insumos y materias primas. Las empresas consultadas señalaron que muchos clientes adelantaron pedidos en noviembre, y eso explicaría la fuerte caída mensual. Así, siendo diciembre el mejor mes del año para este sector, para muchas industrias terminó siendo el peor.
“Aún no podemos recuperarnos porque no se normaliza el desabastecimiento de materia prima por parte de los proveedores” (Empresa de la ciudad de Córdoba).
“Tuvimos la producción frenada la mitad del mes porque no conseguíamos insumos” (Fábrica de Rosario, Santa Fe).
Indumentaria y textil
La producción se retrajo 10,2% anual a precios constantes en diciembre, acumulando un incremento del 3,3% en el año. En términos mensuales la actividad presentó una disminución de 20,4%. Aún así, las industrias operaron al 75,1% de su capacidad instalada, superando la cifra registrada en noviembre, que fue del 74,4%.
La caída interanual se explica porque las empresas arrancaron con producción más intensa en octubre y noviembre, anticipando un fin de año electoral de mucha incertidumbre, con expectativas devaluatorias y cambios en las regulaciones de la importación. Por eso diciembre fue atípicamente tranquilo. El 54% de las empresas consultadas reportaron dificultades en la reposición de stock, levemente por debajo de noviembre.
“Diciembre debió haber sido mejor que noviembre, porque los pedidos de producción suelen subir para cubrir la venta minorista de las fiestas, pero este año no ocurrió así” (Fábrica de la ciudad de Mendoza).
“Estamos produciendo al máximo, pero se vende muy poco y se nos acumulan los stocks” (Fábrica de Morón, Gran Buenos Aires).
Maderas y muebles
La producción bajó 34,4% anual a precios constantes en diciembre, y finalizó 2023 con una caída de 2,4%. En términos mensuales, la actividad mermó 36%. Durante el mes, las industrias operaron al 71,6% de su capacidad instalada, muy por debajo de noviembre (76,3%).
Las empresas del sector tuvieron frenados los pedidos de producción durante casi 15 días por la falta de precios de muchos productos y el encarecimiento de la madera -su insumo básico-, que tuvo aumentos constantes a lo largo del mes.
“Hubo muchos problemas en la reposición de stock de materia prima. Hace meses que hay inconvenientes con la suba de precios y las listas que los proveedores no entregan. En diciembre, jugaron con los aumentos y se complicaba la compra de lo necesario para producir” (Fábrica de muebles de la Ciudad de Buenos Aires).
“Con el cambio de gobierno y de precios repentinos hubo mucha incertidumbre en la gente a la hora de comprar estas cosas” (Fábrica de Pergamino, Provincia de Buenos Aires).
Metálicos, maquinarias, equipos y material de transporte
En diciembre la producción tuvo una contracción anual de 35,7% a precios constantes, acumulando una disminución de 4,3% en el año. Fue el sector con mayor caída anual. En la comparación mensual, se registró una baja de 34,5%. Las industrias operaron al 70,8% de su capacidad instalada, por debajo del 71,8% de noviembre.
Se experimentaron numerosas dificultades para adquirir acero, y los proveedores que suministraban este material exigían pagos en efectivo y por adelantado. Seis de cada diez empresas consultadas enfrentaron problemas en la reposición de stocks. Las empresas más pequeñas señalaron la pérdida de competitividad frente a las más grandes, que adquieren directamente el insumo del fabricante.
“Vendimos una barbaridad antes del 10 de diciembre, supongo que por la especulación con el dólar. Luego, la actividad se murió. Yo creo que adelantaron compras” (Fábrica de Caseros, en Gran Buenos Aires).
“Diciembre fue el peor mes del año, cerramos algunos días porque no teníamos pedidos. Además, no hay créditos y las expectativas de ventas para enero y febrero son desfavorables” (Fábrica de la Ciudad de Buenos Aires).
Productos químicos y plásticos
La producción experimentó una significativa contracción del 32,9% anual en diciembre, a precios constantes, acumulando una disminución del 5,5% en los doce meses del año. En la comparación mensual, se observó una retracción del 27,4%. Durante este mes, las industrias operaron a un 70,6% de su capacidad instalada, por debajo del 72,6% de noviembre.
Numerosos proveedores suspendieron la venta de insumos durante varios días, mientras que otros comercializaron productos con precios abiertos, a confirmar después de la entrega. Algunas empresas decidieron abstenerse de proporcionar precios a sus clientes y reducir la producción durante ciertos días. Hacia fin de mes se empezó a notar cierta mejoría en la provisión de insumos y, si esta tendencia se mantiene, se anticipa un panorama de mayor estabilidad productiva en el futuro cercano.
“Necesitamos que se empiecen a liberar las importaciones de materias primas para aumentar o continuar con el nivel de producción” (Fábrica de la ciudad de Córdoba).
“Tuvimos problemas en conseguir materia prima e insumos y mercadería de reventa, porque no había o por los excesivos precios. La devaluación del tipo de cambio en 100% nos trajo problemas con clientes porque no pudieron entender que nuestros precios están sujetos a la variación del precio del dólar oficial. Al ser empresa química compramos al tipo de cambio oficial” (Fábrica de la ciudad de Resistencia, en Chaco).
Papel, cartón, edición e impresión
La producción sufrió una pronunciada disminución del 32,7% interanual en diciembre, a precios constantes, acumulando una significativa caída del 16,7% a lo largo de 2023. En términos mensuales, se registró una retracción del 22,7%. El sector operó al 76,7% de su capacidad instalada (comparado con el 80% en noviembre). Además de los problemas con la disponibilidad de insumos y los aumentos de precios, las empresas del sector se vieron afectadas por los cortes de energía.
“Hubo mucha inflación. Los precios variaron cada semana y diciembre, que no es el mejor mes para nosotros, terminó siendo peor de lo esperado” (Industria de ciudad de La Rioja).
“Fue un mes muy malo. Estamos muy preocupados por la situación actual” (Empresa de la ciudad de Mendoza).