Cada uno puede tener su versión y visión. Este articulo esta escrito de manera neutral y también con una conclusión analítica. Desde mi postura, doy fe que confío en el Secretario Daniel Scioli hará una gran labor. Éxitos Daniel!
¿Quién es Daniel Scioli?
Foto: Twitter oficial
- Nombre completo: Daniel Osvaldo Scioli
- Fecha de nacimiento: 13/01/1957
- Lugar de nacimiento: Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA)
- Profesión: licenciado en Comercialización (Universidad Argentina de la Empresa, UADE)
- Agrupación política: Partido Justicialista
- Cargo público actual: secretario de Turismo, Ambiente y Deportes
- Cargos públicos anteriores: embajador de Brasil, gobernador de la Provincia de Buenos Aires y vicepresidente de la Nación
- Club de fútbol: Boca
- Familia: sus parejas fueron Margarita Beltrán, con quien tuvo a su hija Lorena; Karina Rabolini y Gisela Berger, con quien tuvo a su otra hija, Francesca.
“Lealtad, perseverancia, humildad”. Esos son los 3 valores principales para Daniel Scioli, a juzgar por sus respuestas a un cuestionario que se circuló en 2015 entre los candidatos presidenciales de ese año. Aquella vez, siendo el postulante único del ahora extinto Frente para la Victoria, ganó en primera vuelta pero perdió en el balotaje contra Mauricio Macri (Cambiemos). Ocho años después y contra todas las presunciones, volvió a intentarlo, como precandidato de Unión por la Patria, el nuevo sello del Frente de Todos, pero finalmente se bajó de la precandidatura.
La popularidad originaria de Scioli no viene de la política sino del deporte: entre los años 80 y 90 fue piloto de motonáutica. El 4 de diciembre de 1989, sufrió un accidente en su lancha y perdió el brazo. En paralelo a su carrera deportiva, se desempeñó en el mundo de los negocios: en 1989 lo contrató la compañía sueca de electrodomésticos Electrolux y consiguió que se instalara una fábrica en Buenos Aires, en 1994. Desde ese año y hasta 1997 fue director de la filial de la firma, Electrolux Argentina.
En 1991, se casó con la modelo Karina Rabolini, a quien la opinión pública la recuerda como su compañera de vida. En 1998 se divorciaron, se reconciliaron en 2001 y en 2016 se produjo su ruptura definitiva. Scioli y Rabolini no tuvieron hijos pero él sí tiene 2 hijas con otras 2 parejas: con Margarita Beltrán, Lorena, que nació en 1978 pero Scioli la reconoció como hija recién en 1993, tras perder un juicio que le había iniciado Beltrán; y Francesca, nacida en 2017, de su más reciente relación con la modelo Gisela Berger.
El exilio, el menemismo y su socio histórico, José Manuel De la Sota
Fue en 1997 el año en el que Scioli dio un golpe de timón en su trayectoria: de la mano de Carlos Menem (Partido Justicialista), entonces presidente de la Nación, ingresó a la política, se presentó como candidato a diputado nacional y ganó una banca. En la Cámara baja fue presidente de la Comisión de Deportes. En 2001, fue reelegido y a los pocos días pidió licencia en su banca para integrarse al gobierno interino de Adolfo Rodríguez Saá (Partido Justicialista), tras la renuncia de Fernando de la Rúa (Alianza).
En esa breve presidencia del sanluiseño Scioli se desempeñó como secretario de Turismo y Deportes, puesto en el que posteriormente sería confirmado por otro presidente, Eduardo Duhalde (Partido Justicialista). La visibilidad que le dio ese cargo y su imagen de hombre sano, deportista y emprendedor, y, sobre todo, la superación por la pérdida de su brazo, lo catapultó a la fórmula con Néstor Kirchner, apoyada por Duhalde, y en contra de quien había sido su mentor político, Menem.
La fórmula Kirchner-Scioli terminó llegando al poder debido a que Menem, que había ganado los comicios presidenciales de 2003, no compitió en el balotaje. Argumentó que no estaban dadas las condiciones para tal votación pero todos sabían que terminaría derrotado por Kirchner.
Hasta entonces Scioli no había sido jamás protagonista de peleas políticas. Su debut fue con el propio Kirchner, que en 2003 lo cuestionó públicamente y echó del Gobierno a toda su gente. Fue una represalia por declaraciones de Scioli contrarias a la política de gobierno del Frente para la Victoria de congelar las tarifas de servicios públicos y por poner en duda la validez jurídica de la entonces eventual anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final en el Senado, cámara de la que Scioli era presidente en carácter de vicepresidente de la Nación.
Con el paso del tiempo y los ánimos recompuestos entre ambos, Kirchner propuso a Scioli como candidato a gobernador de la Provincia de Buenos Aires, objetivo que consiguió. En 2011 fue reelegido.
En 2015, terminó siendo el único candidato del oficialismo, pese al deseo expreso de Florencio Randazzo, entonces ministro del Interior de Cristina Fernández de Kirchner, de participar de una PASO y a pesar de que en el kirchnerismo, y la propia Presidenta, siempre mantuvieron sobre él un manto de sospechas por sus inicios menemistas, por su pasado duhaldista y por su mirada sobre la economía.
“El Pichichi”, apodo con el que lo bautizaron sus compañeros cuando estudiaba en la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), de donde egresó en 2015 con el título de licenciado en Comercialización, nunca abjuró de su pertenencia al kirchnerismo y siempre se jactó de ser leal a Cristina Fernández de Kirchner.
Scioli sufrió el desgaste político natural de 8 años de gobierno, pero que fue aumentado al quedar pegado al kirchnerismo en medio de la pelea contra el campo, siendo gobernador de una provincia ampliamente agropecuaria, y por las inundaciones del 2 y 3 de abril de 2015 en La Plata, como consecuencia de las cuales murieron 89 personas y miles quedaron damnificadas. A su gestión se le criticó la falta de obras hídricas para evitar la tragedia.
Tras su derrota en el balotaje contra Macri, Scioli ocupó el quinto lugar en la lista de candidatos a diputado nacional de Unidad Ciudadana, la agrupación fundada por Fernández de Kirchner para enfrentar al macrismo con un peronismo convertido en diáspora.
En 2019, apoyó a la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner y fue retribuido con su designación, en marzo de 2020, como embajador en Brasil. A mediados de 2022 se desempeñó durante algunas semanas como ministro de Desarrollo Productivo, cargo en el que fue a reemplazar a Matías Kulfas. Pero, con la llegada de Sergio Massa -un viejo adversario interno suyo- a un empoderado Ministerio de Economía, Scioli quedó afuera del gobierno tras lo cual el presidente Alberto Fernández lo nombró nuevamente al frente de la embajada argentina en Brasilia.
En 2024, tras el triunfo de Javier Milei (La Libertad Avanza) como presidente fue designado secretario de Turismo, Deportes y Ambiente. El anuncio se hizo a través de la cuenta de X del ministro del Interior de la Nación, Guillermo Francos.
¿Qué es impunidad?
La impunidad es la imposibilidad de ser sancionado. Se trata de una excepción de condena o una forma de escapar de la justicia. Es común en algunos países en los que se carece de un sistema político limpio y que repercute en un sistema judicial corrupto y débil.
Etimológicamente, procede del vocablo latino impunitas. Se trata de la circunstancia resultante al no recibir un castigo o no ser juzgado. Y al hablar de castigo, se trata de alguna pena o condena que se ha impuesto y que tenga que cumplir el acusado por haber intervenido en algún hecho delictivo.
Se habla de impunidad cuando el acusado de cometer algún delito en particular no recibe la pena que le corresponde por su accionar. Por lo tanto, no se enmienda su conducta, ni aprende de ella. Es entonces cuando la maniobra de evasión de castigo -o impunidad- se produce por motivos políticos o de otro tipo, y éste que es acusado por transgredir la ley, no recibe ningún castigo ni condena.
Recordemos que el principal motivo por el cual se diseña un sistema de castigos para los culpables dentro del sistema de justicia y dependiendo de cada país, se trata de no sólo hacer pensar al delincuente en el mal que ocasionó a otro/s, sino que también la condena del acusado -victimario- es, de cierta manera, un acto de reparación para con la víctima.
La impunidad acostumbra estar asociada a personas muy ricas y con gran patrimonio, ya que generalmente realizan maniobras de evasión fiscal para evitar, precisamente, pagar los impuestos que les corresponden a sus grandes ganancias. Todo esto movido por una gran ambición.
En los casos de impunidad que más resuenan hoy en día, nos entregan un sentimiento de fracaso e impotencia voraz al vislumbrar la inacción de la justicia, sobre todo con los que conocemos a través de las noticias. El sabernos desprotegidos, sin un sistema de justicia que nos ofrezca la seguridad de que los crímenes son juzgados y castigados, hace que nazcan en nosotros estos pensamientos. ¿Qué sentirías tú si algún amigo es asesinado y su asesino queda libre por falta de pruebas o corrupción al juez y al jurado?
Ejemplos de impunidad
En el caso de que un vendedor de oro que estafa a sus compradores, las víctimas contratan buenos abogados y éstos, de acuerdo al Código Penal con que se rigen las leyes de cada país, sostienen que se juzgue al victimario y piden, presentando pruebas y llevándolo a juicio, una condena adecuada que puede comprender hasta cuatro años, dependiendo de cada país.
El juez que tome la causa se encargará de aprobar la condena, luego de visualizar las pruebas y recibir los testimonios de testigos y demás implicados. Pero en el caso de impunidad, el juez, siguiendo con el ejemplo antes dado, considera que no hay pruebas suficientes para condenar al acusado y lo deja en libertad, declarándolo inocente. Las víctimas, representadas por sus abogados, sostienen que se trata de impunidad y que, probablemente, el juez recibió dinero de dudosa procedencia, con tal de obtener su libertad.
Es importante destacar que, la impunidad, no siempre se trata de una corrupción al sistema de justicia. Hay casos en los que los delincuentes realizan lo que se considera el “crimen perfecto”, que no deja pistas y esto influye en que los casos sean declarados impunes.
Fuente: https://concepto.de/impunidad/#ixzz8QZ5EtA00
La causa penal por corrupción que persigue a Daniel Scioli en su carrera presidencial
La investigación lleva siete años y el fiscal ya realizó el pedido de juicio oral que debe ser resuelto por el juez de Garantías. Una megacausa con avances y archivos que pueden revertirse.
Daniel Osvaldo Scioli, el embajador argentino en Brasil, no tiene el cielo despejado en su camino a la Casa Rosada. Una causa penal en la que está procesado por graves delitos aparece en el horizonte con nubarrones peligrosos de un posible juicio oral. Desde hace siete años navega en el mar embravecido de la justicia que investiga el segundo mandato (2011/2015) de su gestión como gobernador de la provincia de Buenos Aires entre los años 2007 a 2015.
Hace pocas semanas el juez de Garantías de La Plata Agustín Crispo comenzó con el análisis del pedido de juicio oral solicitado por el fiscal Álvaro Garganta, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 11 de La Plata. La investigación penal preparatoria se abrió en el año 2016 luego de una denuncia presentada en persona por la ex diputada nacional Elisa Carrió.
La pesquisa alcanza también a varios ex funcionarios bonaerenses que fueron parte del sciolismo bonaerense, acusados de diversos delitos –negocios incompatibles con el ejercicio de la función pública, tráfico de influencias, incumplimiento de los deberes de funcionario público y dádivas–, según se desprende del requerimiento de elevación a juicios.
La medida se da luego de la nulidad sin sobreseimiento que fue dictada en agosto de 2022 por la Cámara de Apelaciones y Garantías de La Plata. Aquella resolución puso en valor lo planteado por las defensas de los acusados, quienes habían solicitado la nulidad de la pieza procesal y el sobreseimiento. Solo el primero de los reclamos prosperó.
Scioli es uno de los postulantes del peronismo para encabezar la boleta presidencial 2023 y acaso quien cuenta con el mayor apoyo del presidente Alberto Fernández.
La causa se inició el 3 de junio de 2016, cuando la entonces diputada Carrió presentó formalmente la denuncia ante la Fiscalía General de La Plata. El escrito fue remitido al fiscal Garganta. Tras varios un tramo de la investigación se dio por terminada y otros desdoblamientos fueron archivados. Esta medida implica que, si aparecen nuevas evidencias, se podrá revertir, es decir, dictar la reapertura para seguir adelante con la instrucción de expediente.
El pedido de juicio oral en análisis alcanza a Scioli y sus exfuncionarios Alberto Pérez (exjefe de Gabinete), Alejandro Collia (exministro de Salud), Eduardo Aparicio ( exministro de Desarrollo Social y actual titular de la APREVIDE, procesado en otra causa), Guillermo Scarcella (ex titular de ABSA), Antonio Atilio La Scaleia (ex titular de la obra social IOMA) y el contador Walter Carbone, junto a los empresarios Ricardo Estanislao Miller (conocido como el Lázaro Báez bonaerense), Juan Carlos Mancinelli y Daniel Osvaldo Robert, entre otros.
En la causa se investigaron delitos de presuntas negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública, tráfico de influencias, incumplimiento de los deberes de funcionario público y dádivas. En uno de los alcances se indaga sobre el posible pago de sobreprecios y sobornos en la construcción de Unidades de Pronta Atención (UPA) en distritos de Buenos Aires. Según la investigación, para ello habrían contratado a la empresa de Miller.
FOJAS JUDICIALES
En el alcance número 1 se investigó el manejo de fondos en la empresa de servicios de agua potable y cloacas Aguas Bonaerenses Sociedad Anónima (ABSA), por la que fueron procesados Guillermo René Scarcella (expresidente de ABSA) y el funcionario Pablo Damián Elías. Los acusados deberán defenderse en el posible juicio por los delitos de “negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función pública (22 hechos en concurso real) e incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
En el alcance número 4 del expediente se indaga sobre el manejo de fondos en el Instituto Obra Médico Asistencial (IOMA), la obra social de los bonaerenses. Al tope de la lista de acusados se anota el ex titular mutualista La Scaleia, junto a 19 funcionarios y presuntos “empleados infieles”, por los delitos de “negociación incompatible con el ejercicio de la función pública, peculado de caudales (78 casos que concursan realmente entre sí) en concurso ideal con fraude en perjuicio de administración pública (78 casos que concursan realmente entre sí), uso de documento público falso (78 casos que concursan realmente entre sí) en concurso ideal con asociación ilícita”. En este tramo de la pesquisa, se indagó sobre presuntos fraudes con internaciones domiciliarias.
También se pidió el juicio oral para el exjefe de Gabinete de Scioli, Pérez, y su ex subsecretario administrativo Walter Carbone (el dueño de la caja fuerte en forma de dragón), quienes, junto a otros cinco exfuncionarios, están procesados por “peculado en concurso ideal con administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública e incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
En este legajo se investigó el presunto desvío de fondos destinados a la compra de material escolar sobre el cuidado del medio ambiente, que –según el expediente- finalmente fueron utilizados para la impresión de boletas “Scioli Presidente” para las elecciones de 2015. También el uso de facturas apócrifas por servicios de catering nunca realizados.
En la misma causa fueron procesados el exministro Aparicio y el empresario Daniel Roberts por los delitos de “negociación incompatible con el ejercicio de la función pública en concurso real con administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública en concurso ideal con incumplimiento de los deberes de funcionario público”, conducta antijurídica que tiene una pena de hasta 12 años de prisión. En este caso, se investigó la millonaria entrega de subsidios a cooperativas inexistentes.
La trama de la obra pública encuentra su respaldo documental y probatorio en el alcance 6 de la investigación, en la que tiene procesados a Gladys Perez Ferrando, Gabriel Pérez de Vargas, César Marcos, Paula Kammeraht, Carolina De Tomasso, Daniel Soncini, el empresario Juan Carlos Mancinelli (oriundo de Tigre), Marcelo Cristian Beneyte y Pablo Adrián Fontanari, por los delitos de “negociación incompatible con el ejercicio de la función pública (19 hechos en concurso real) en concurso ideal con incumplimiento de los deberes de funcionario público (19 hecho en concurso real)”.
Pero la investigación no se agota en las dependencias gubernamentales ya mencionadas. Quedan pendientes de investigar otras áreas como Secretaría General de la gobernación, Lotería y Casinos de la provincia de Buenos Aires, Puerto La Plata y Dirección General de Cultura y Educación bonaerense. Estos cuatro alcances fueron archivados pero el fiscal aclaró en su resolución: «que se haya podido avanzar en unas y en otros no tanto no elimina la vinculación que emerge de la denuncia».
GPS DEL EXPEDIENTE
Según la documentación oficial a la que accedió Borderperiodismo la investigación penal preparatoria tramita bajo el número 06-00-020688-16/00, causa principal con Scioli procesado. Pero se realizaron ocho desdoblamientos:
01 ABSA
02 Loterías y Casinos (archivado)
03 Puerto La Plata (archivado)
04 IOMA
05 Jefatura de Gabinete
06 Obra pública
07 Secretaría General (archivado)
08 Dirección General de Educación y Cultura (archivado)
En una resolución del 17 de mayo pasado el juez Crispo informó que tratará cada uno de los alcances con requerimiento de juicio por separado (ABSA, IOMA, Jefatura de Gabinete y obra pública) “circunscribiendo la evaluación y valoración de lo solicitado a la parte pertinente de cada uno de ellos”.
La hipótesis del caso del fiscal tiene algunas zonas grises. Dijo que no pudo establecer “ni cómo, ni dónde el exgobernador” habría influido sobre sus colaboradores para que delinquieran. “Si bien puede establecerse cuándo (entre los años 2011 a 2015), no puede esta instrucción probar si la determinación se produjo por medio de una charla personal, a través de un chat de WhatsApp y/o Telegram, en el interior de una oficina y/o tomando un café en un bar”, admitió, pero se apoyó en “prueba indiciaria”. Esa evidencia de indicios debe generar certeza en la magistratura (juez de Garantías y camaristas) que deben resolver antes que el caso sea llevado a juicio o no. Pero para la etapa de debate oral falta que corra mucha agua debajo de los puentes judiciales.
Conclusión
Daniel Scioli habló de su relación con Javier Milei y sobre la posibilidad de integrar el próximo gobierno
El Ex- embajador argentino en Brasil dijo que siempre lo encontrarán “buscando ayudar”, pidió “respetar los tiempos constitucionales y destacó que al presidente electo lo conoce “desde hace muchos años”
Se trata de una persona que ha sido aun ejemplar deportista de motonáutica argentino. Sufrió un duro accidente, y de todas maneras, siguió adelante. Tiene un carácter muy moderado. En las relaciones sociales se lleva bien con personas de diferentes ideologías políticas. Todas las personas cargamos con una mochila. Y dejemos ver el tiempo, dándole la oportunidad para ver como se desempeña en el Cargo nombrado.
Una opinión sobre “Quien es Daniel Scioli- Las distintas versiones de su historia y la mochila: ” el aj …”
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