El Gobierno nacional publicó hoy el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que convalidó un aumento de 27,5% para los jubilados y pensionados en los haberes de abril, pero la redacción de la norma generó confusión y zozobra entre quienes están próximos a cobrar.
Un acuerdo entre funcionarios nacionales y legisladores traería de regreso la actualización de jubilaciones de la época de Cristina Fernández.
El DNU confirmó que desde abril los jubilados cobrarán un aumento de 13,2% correspondiente al Índice de Precios al Consumidor (IPC) de febrero, más un 12,5% como compensación por enero que no fue calculada. A esto se le sumará el bono de $ 70.000 anunciado oportunamente.
Para los meses siguientes se mantendrá el mismo esquema, tomando la inflación de dos períodos anteriores. O sea, en mayo cobrarán un aumento equivalente a la inflación de marzo (lo que se conoce como t-2, donde “t” es el período a cobrar -2 meses)
¿Por qué t-2? Porque, por ejemplo, la inflación de marzo se conocerá a mediados de abril, en consecuencia quienes cobran en los primeros días no tendrían factor de actualización. De esta forma se realiza el cálculo sobre el último índice de costo de vida conocido.
¿Cómo se cobra en mayo? En mayo los jubilados cobrarán un aumento equivalente a la inflación de marzo y en junio a la de abril.
¿Qué pasó con el DNU que generó confusión? Dado que el trimestre está en curso, modificar la fórmula de actualización actual podría derivar en juicios. Entonces, se decide mantener la actual fórmula hasta junio (cuando finaliza el segundo trimestre) y desde el 1° de julio rige plenamente la nueva metodología de ajuste por inflación.
Entonces ¿cómo se empalman ambas mecanismos? En mayo y junio se aplica la fórmula de actualización vieja y se suma lo que pudiese faltar para llegar a la inflación. Es una mera de forma de calcular el aumento, pero que en las primeras horas del día provocó mucha preocupación entre los jubilados porque la primera interpretación fue que sólo recibirían el 12,5% de aumento en abril y luego “adelanto” de compensaciones”.
“Si el aumento acumulado a junio es menor a lo que hubiera surgido de la fórmula de movilidad actual, se compensa la diferencia. Si el aumento es mayor al que resultaba de la fórmula, no hay descuento y se considera incorporado al haber”, fue la explicación que al mediodía ofreció oficialmente Martín Vauthier, asesor del Ministerio de Economía.
En la misma línea, el vocero presidencial, Manuel Adorni, señaló que “el cambio de fórmula del nuevo decreto sobre jubilaciones será a partir de abril, no como dijeron algunos medios, cuando estaremos aplicando el índice de febrero. Se le sumará el bono y la recompensación, lo que dará un ajuste de 62%”.
La duda no despejada aún es cómo será el manejo de los bonos.