USA TU MEMORIA

Me afectó más de lo esperado algo que pasó en el trabajo esta semana. No fue lo que pasó en sí lo que me hizo tambalear, sino la naturaleza del incidente y las memorias asociadas o ancladas que tengo sobre acciones similares. Hay cosas que simplemente suceden, que te recuerdan que la vida no siempre es fácil, lo sé porque yo también las vivo.
Tenemos guardadas muchas memorias en nuestro cerebro y yo doy gracias por tener la buena memoria con la que he sido agraciada. Sin embargo, existen momentos en los que apreciaría que mi memoria no fuera tan aguda.
Es normal que tengamos muchas cosas guardadas u olvidadas, pero cuando las vemos nos suelen recordar momentos determinados en nuestras vidas. Algunos momentos los recordamos con alegría y hacen brotar desde nuestra alma sentimientos de amor y gratitud. Otros momentos nos traen tristeza y la memoria de un dolor sufrido y tiempos de angustia.
Puede ser cualquier cosa, acción o emoción, lo que te traiga algo a la memoria. Estoy segura de que cuando ordenas tu casa o tu lugar de trabajo encuentras algún objeto, foto, carta, postal, revista, cartel, moneda extranjera, premio, cuaderno, peluche, adorno o cualquier otra cosa que te traslada a un momento o etapa específica de tu vida.
Pensando en eso es quiero dar gracias por tener memoria. Tu memoria, al igual que la mía, está a tu servicio y tu mente hará lo que tú le indiques con tus recuerdos. Puedes decidir usar tus memorias a tu favor o en tu contra, es una elección exclusivamente tuya.
Me encantaría animarte a que aceptes tus memorias y celebres tenerlas, tanto las malas como las buenas. Recuerda que cada cosa que has vivido te ha hecho más fuerte, ya sea a través del amor o a través del dolor.
Toma un momento para mirar alrededor tuyo y buscar las cosas que te hagan recordar algo:
Reflexiona un momento sobre tu pasado y date cuenta de todo lo que has vivido, todas las maravillosas cosas que has hecho.
Agradece a la vida por las personas que han estado cerca de ti para ayudarte, animarte y amarte en tu camino.
Recuerda los muchos logros que has celebrado, por más pequeños que hayan sido. Si todavía no los has celebrado, tómate un tiempo hoy para celebrarlos.
Piensa en las circunstancias difíciles que has enfrentado y de las cuales has salido adelante, con más experiencia y más fuerza para vivir una vida mejor.
Haciendo todo eso te habrás dado cuenta de que eres todo un campeón. Tu vida está llena de metas ya alcanzadas y obstáculos superados.
¡Eres mucho más grande de lo que pensabas!
Ahora, vuelve al presente para pensar en tus metas actuales y proponte un plan de acción parar conseguirlas; sabiendo que tu memoria le ha regalado a tu mente todo lo que necesita saber para lograr convertir tus sueños en realidad.
¡Las memorias de crecimiento te llevarán a un presente de excelencia, no las desperdicies!
“¡Qué pobre memoria es aquella que sólo funciona hacia atrás!”