El ministro de Energía y Minería, Jaime Álvarez, cuestionó nuevamente la decisión de YPF de retirarse “intempestivamente” de Santa Cruz y, calificó de “extraña” la relación con la empresa que tiene proyectos de inversión en Palermo Aike, un yacimiento “no convencional” que se calcula es similar a Vaca Muerta en Neuquén. A la vez, instó a la operadora a tener mayor responsabilidad con las comunidades de los lugares donde explota los recursos.
“Es una discusión permanente” recalcó con contundencia al comentar la relación de la Provincia con la denominada “operadora de bandera” y, en ese contexto, calificó de “lamentable” los alcances que está teniendo la negociación “porque –dijo- tiene ochenta años de historia explotando los recursos santacruceños, con momentos buenos y otros malos, pero es indiscutible que es una empresa que se forjó a nivel nacional con recursos patagónicos”.
Álvarez fue concreto al señalar que la retirada “no debió ser intempestiva”, por el contrario “debería hacerlo hecho en forma ordenada” y que calculó desde el año 2014, cuando comenzaron las primeras perforaciones en el no convencional de Vaca Muerta (Neuquén), “las grandes empresas argentinas han apuntado a invertir en ese lugar que definitivamente les da más ganancias y tienen mayor tasa de retorno el proyecto”.
Tras recordar que en el mes de febrero de este año “YPF tomó la decisión de retirarse de la mayoría de sus proyectos que tenía en el país de forma total o parcial, en Santa Cruz es casi de forma completa en lo que hace a convencional maduro”. A la vez, admitió que el gobierno provincial entiende que “las empresas tienen que crecer y desarrollarse” pero al respecto aclaró que “también consideramos que debería haber una transición mucho más organizada y no dejar de invertir de repente, generando una situación muy complicada que impacta en la caída de la producción y en una desinversión abrupta para las provincias”.
Dada la situación, las autoridades de YPF mantienen periódicamente reuniones con el gobernador de Santa Cruz, Claudio Vidal, pero el diálogo no alcanza acuerdos “ya que –sostuvo- la empresa se comprometió a varias cosas, pero son intenciones que no se han visto reflejadas en la realidad”.
“Es una empresa y está bien que busque maximizar sus beneficios, pero no debe ser de esta manera su retirada, porque al fin y al cabo tiene un cincuenta y un por ciento que la hace una firma del Estado nacional con participación de las provincias”, recalcó Álvarez.
De esta forma, opinó que “debería irse cumpliendo con lo que se pacta y con una inversión que debe mantenerse en el tiempo por lo menos hasta diciembre, hasta que ellos, a comienzos del año que viene, estén mirando otra realidad” y, en ese sentido, aseguró que “creemos que debe tener más responsabilidad con las comunidades y con los trabajadores, si cae la producción caen las regalías que son muy importante para las provincias, de eso dependen los sueldos, las inversiones y se atienden las cuestiones más urgentes en cuanto a salud, educación, seguridad e inversión en infraestructura básica”.
El funcionario no desconoció que “debemos entender que este es un proceso irreversible que se va a dar en todo el país y no hay muchas empresas privadas que puedan hacerse cargo de los lugares que va dejando YPF en toda Argentina. Por eso, es también un proceso que hay que tener en cuenta por parte de YPF, porque las empresas de menor porte van a aparecer, pero se necesita un tiempo para que sean muy eficientes, con costos muy regulados y controlados y con una experiencia que debe afianzarse con el tiempo a través del conocimiento continuo para sacar hasta el último resquicio de hidrocarburos de los yacimientos, ya sea gaseoso o líquido”.
“Hay algo que queremos que YPF tenga en cuenta, una cosa es que las cuencas que deja, estén funcionando y los nuevos operadores optimicen y recuperen aquellos pozos inactivos y, rápidamente, pasen a una etapa de recuperación secundaria o terciaria; y otra cosa es que con más de un año de desinversión, estas empresas deben gastar mucho más dinero en poner en funcionamiento pozos inactivos para recién en un promedio de dos años pasar a perforar”, explicó. En tanto, el ministro de Energía y Minería, insistió en que “las empresas para sustituir a YPF van a aparecer, lo sabemos, en lo que no estamos de acuerdo es en la forma de irse, no se abandona, simplemente, un lugar a su suerte, hay que mostrar respeto y seriedad”.
Llamativamente, YPF tiene injerencia en el proyecto Palermo Aike, un yacimiento no convencional que está en estudio y que se calcula podría representar el futuro económico de Santa Cruz. Consultado por la relación con una firma que está programando abandonar cuencas sin más discusión, pero que también está pensando en invertir en un proyecto nuevo, Álvarez expresó que es paradójico que “por un lado, YPF deja la parte los yacimientos maduros pero, por otro lado, invierten millones de dólares en alternativas no convencionales como este proyecto que va a ser muy redituable”.
“Van a invertir 110 millones de dólares en un área no convencional que le va a dejar muchos beneficios y, en forma muy irresponsables, se van de las áreas más antiguas” indicó. Al tiempo manifestó que por estas razones “tenemos estos meses de trabajo y hay mucha discusión”.
“El gobernador Claudio Vidal –enfatizó finalmente- lleva adelante este proceso buscando el mayor beneficio para Santa Cruz. “Sería muy fácil hacernos amigos y dejarlos hacer lo que quieran, pero cuando hay que defender los intereses de los habitantes de la Provincia, hay que dar el debate como corresponde. Nos vamos a pelear si es necesario con cualquier empresa que sea irresponsable con Santa Cruz”, cerró.