Tanto tiempo de mentiras que vivieron los argentinos, y hoy se dejan sobrellevar y engatusar con el discurso del GATO MILIE, quien les promete y se defiende, solo por su discurso estudiado. Como sabemos el LEON se convirtió en GATO: Pareciera que la Quinta de Olivos esta embrujada con el Ritual del Gato. Que Argentina inocente….
El discurso del presidente Javier Milei en el Congreso Nacional del 15/09/24, por el cual presentaba el presupuesto para el año 2025, fue propio de un Virrey del año 1800, dirigiéndose a la colonia argentina, ex virreinato del Río de la Plata, cumpliendo los mandatos del actual monarca “Mercado Financiero”.
Como colonia, ya se ha mandado y se sigue mandando el oro nuestro, a disposición del monarca, mientras que el pueblo no sabe cuánto oro se envió y dónde está guardado.
Además, como buen virrey, Milei le garantizó a la monarquía que, siempre hará que se pague lo que pretende ella y si hay mejoras de ingresos fiscales en el Estado colonial, se va a priorizar el pago de la deuda y sus intereses, que se tiene con la casta monárquica, no obstante, muchas de esas supuestas deudas son odiosas, usurarias, írritas e ilegítimas.
Dejando en claro Milei, que siempre se “honrarán” esas deudas, ya que todo lo que se honra, en este caso al “Dios Dinero Especulativo”, es superior al pueblo y esa propiedad privada de un Dios, siempre estará garantizada.
A su vez, si bien se pregona la defensa de la propiedad privada, no se aclara, que sólo es la que la de monarquía financiera. Al pueblo y particularmente, a los jubilados, para ellos no hay propiedad privada, sino que se les “priva de la propiedad”. Se justifica el robo a los jubilados, para no producir desequilibrio fiscal, porque puede afectar la garantía a la propiedad usuraria de la monárquica financiera.
La casta feudal que defendió el tesoro de la monarquía, o sea, los legisladores que aprobaron el veto presidencial, el virrey los trató como 87 héroes “caballeros del rey”. Sólo en una monarquía son héroes y los festejan, con un asado argentino, a quienes han atacado los derechos del pueblo, que tienen el deber de representar. Mientras tanto los más débiles no tienen acceso a los alimentos que tiene el Virrey, que los deja vencer y no se los entrega a los comedores comunitarios o populares. Todo ello, en un accionar protervo, o sea, obstinado en la maldad.
A su vez, el virrey criticó a la “justicia social” porque sostuvo que en base a ella el Estado, le saca plata a la monarquía y a los señores feudales, para dársela a quienes no la ganaron.
Por ello, en el presupuesto de 2025 se rebaja un 22 % al impuesto a los bienes personales y se les saca a los importadores el impuesto país, mientras que, los pequeños contribuyentes monotributistas deberán pagar un 198 % más.
Asimismo, a los monarcas y caballeros feudales amigos que inviertan en el Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI), se les ofrece incentivos fiscales, aduaneros y cambiarios durante 30 años. El capital RIGI sólo pagará el 25 % como impuesto a las ganancias y no pagarán el impuesto al valor agregado (IVA), entre otras ventajas, mientras que, a los productores o industriales patrios se les cobrará el 35 % como impuesto a las ganancias y el 21 % como IVA.
Genocidios por goteo desde la indiferencia y abandono
En esos planteos tramposos y perversos, dirigidos a súbditos maltratados, Milei pretende justificar crímenes sociales de lesa humanidad, verdaderos genocidios por goteo desde la indiferencia y abandono, generando situaciones que llevan a la indignidad y a la muerte genocida de las personas, como los adultos mayores. No se les reajustan debidamente sus jubilaciones o retiros y cobran ingresos por debajo de la línea de pobreza o la indigencia, no se les dan los medicamentos que les daba el PAMI, se precariza el acceso a la salud y quedan a merced de tener que optar entre comer o comprar los medicamentos necesarios.
El “hambre” gobierna el futuro y el virrey no hizo una sola referencia a la situación social, cuando un informe del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, (UNICEF) afirmó que, en el país, hay un millón de niños/as que se acuestan sin cenar.
No se les reconoce a los jubilados una diferencia de sueldo a su favor de $ 15.000 mil pesos promedio, al vetar la ley, mientras que al vocero presidencial Manuel Adornis se lo eleva a nivel de Ministro y obviamente, con el mayor sueldo de ministro.
Además, todo se acomoda a lo sostenido en el “Informe sobre la estabilidad financiera mundial”, de 2012, realizado por el Fondo Monetario Internacional o Fondo Monárquico Intocable (FMI), que puso de relieve las implicaciones financieras del riesgo de longevidad. Se sostenía la necesidad de recortar las prestaciones jubilatorias, ante “el riesgo de que la gente viva más de lo esperado”.
El virrey pretende que quienes tenemos determinada edad pidamos disculpa a la sociedad por serle una carga y se habilita la “cultura de confrontación”, desde la canallesca acusación dirigida a los mayores de “robar el futuro a los jóvenes”.
Dentro de las graves injusticias que se provoca a la mal llamada clase pasiva, el virrey no habla de los juicios de los jubilados, perdidos por el Estado.
La ley vigente 24.463 del Procedimiento Judicial de la Seguridad Social, del año 1995, determina, de una forma discriminante, en el artículo 21 que, ante los juicios de naturaleza previsional, “en todos los casos las costas serán por su orden”.
O sea, la norma establece, que no obstante los jubilados o pensionados hayan ganado el juicio a la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSeS), lo mismo deben pagar sus gastos y los honorarios de sus abogados.
Ello trae en consecuencia que el Estado, al no tener que pagar las costas, interpone todos los recursos posibles para dilatar cualquier resolución judicial aún, cuando en el tema planteado hubiera jurisprudencia pacífica, contraria a la postura asumida por el ANSeS. Repárese, en este aspecto que, por lo general, el Estado Nacional lleva las causas hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación, lo que significa, además, mayores costos para las personas mayores accionantes, en un extenso territorio como el nuestro, que deben terminar litigando en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, sede del máximo tribunal del país.
A su vez, la demora arbitraria, discriminatoria y cruel, en cuestiones de contenido alimentario y vital, a la que el Estado Nacional somete a los/as jubilados/as, al no reconocerles sus derechos, no solo perjudica sus patrimonios, sino que, también ataca uno de los bienes escasos de las personas mayores, como es el tiempo. Un reconocimiento tardío de sus derechos les impide, muchas veces, disfrutar, adecuadamente, de lo que les es propio.
Pero ahora, Milei no dice que se van a pagar la deuda de los 90.000 juicios ganados por los jubilados y retirados. Ese dinero de propiedad de los que ganaron no queda claro cuando se abonará.
Tampoco el virrey aclara si abonará las abultadas deudas que tiene con las Cajas de Jubilaciones provinciales, como es el caso de la de Córdoba. Pero les dice a los gobernadores que deben ajustar aún más sus cuentas.
No se puede tolerar el genocidio por goteo de nuestros ancianos.
De mal en peor: El 73% de los jubilados en Argentina viven en la pobreza – Milei un Presidente que da ascoooo
Un informe de la ONG HelpAge Internacional hace referencia a los jubilados y las cifras contrastan con las del INDEC. Cada vez más pobreza.
06 de septiembre de 2024 – 10:10
Según una ONG internacional, el 73% de las personas mayores a 61 años en la Argentina, viven en la pobreza. Se trata de una cifra muy por encima al 17,6% que desprende el INDEC. El informe analiza los primeros tres meses del gobierno de Javier Milei y la situación de los jubilados.
La ONG HelpAge Internacional, es una red global que está destinada a seguir de cerca la calidad de vida de los adultos mayores y que en el país está compuesta por organizaciones como la AMIA, Fundación Navarro Viola, Sociedad Argentina de Gerontología y Geriatría, el Centro sobre Envejecimiento Activo y Longevidad de la Universidad ISalud, entre otros.
Los principales ejes que aborda el texto (que se presentará el próximo 10 de septiembre a las 17 por Zoom) son inseguridad económica, alimentaria, pérdida del poder adquisitivo, falta de acceso a fármacos y atención médica, recortes en políticas de cuidados de personas mayores y el salto de los importes en cuidados para estos ciudadanos.
Jubilaciones mínimas
Dentro de su informe titulado “Personas mayores y vulnerabilidad, diagnóstico de situación en la Argentina durante el primer trimestre de 2024”, la organización indica que el crecimiento de las tarifas, los recortes en los medicamentos, el incremento del precio de los alimentos y la no actualización de las jubilación, en sintonía a los aumentos en lo que va del año, son los principales factores que generaron mayor impacto entre los más grandes.
El escrito precisa que el 5,2 millones de adultos cobran una jubilación o pensión inferior a $340.000, mientras que la canasta básica para jubilados “de acuerdo con la estimación de la Defensoría de la Tercera Edad de la Ciudad de Buenos Aires en marzo 2024, es de $685.041, un 200% por encima del valor que considera el INDEC”.
Al respecto, las estadísticas del INDEC, a principios de año, muestran que la Canasta Básica Total subió un 39,4% durante el primer bimestre del 2024. En ese sentido, en febrero una persona necesitó $223.593 para no ser pobre, mientras que la Canasta Básica Alimentaria registró en los dos primeros meses un alza de 34,1%, siendo su valor de febrero $104.483 por adulto equivalente.
“El impacto de las políticas de ajuste en la población se pone en evidencia al analizar las cifras alarmantes de pobreza e indigencia. La última medición de pobreza oficial arrojó que el 41,7% de la población se encontraba bajo la línea de pobreza y el 11,9%, de la de indigencia, es decir que no pueden cubrir los gastos de la Canasta Básica Alimentaria. De acuerdo con los últimos datos oficiales, la pobreza en personas mayores de 65 años subió de un 14,5% en el segundo semestre de 2022 a 17,6% en igual período de 2023″, expone el informe.
Este escenario de elevada inflación, retoque de tarifas y ajustes impacta sobre la población mayor debido a los exiguos montos de las jubilaciones y pensiones mínimas, que resultan insuficientes para cubrir sus necesidades básicas.
Las consecuencias de la crisis económica
Tal lo mencionado, las personas mayores se ven fuertemente afectadas por la crisis económica que atraviesa el país. Esto no solo pasa por el alza de las tarifas de servicios y alimentos, sino también por lo de los medicamentos más utilizados, “lo que ha llevado a una alarmante disminución de la compra de fármacos recetados (17%)”, detalla el documento.
En ese marco, Silvia Gascón, una de las autoras de dicho informe, aseguró que “Lo más duro es pensar que detrás de cada aumento y cada ajuste hay alguien que no pudo satisfacer sus necesidades”.
“Alguien que fue a la farmacia y tuvo que volver con uno solo de los remedios que necesita o ninguno; aquellos que debieron reducir a una sola comida su alimentación diaria; los que dejaron de ir al curso que les gustaba porque no pueden pagar el transporte, o aquel o aquella que ya no puede cocinar con gas y debió recurrir a la leña”, enumeró y agregó: “Son rostros concretos de quienes llegan a la vejez constatando que su calidad de vida ha empeorado”.