El 19 de enero de 2025, el líder de la FPÖ, Herbert Kickl, anunció que, a pesar de haber recibido una invitación, no asistirá a la toma de posesión de Donald Trump en Washington. En su lugar, la diputada y portavoz de política exterior de la FPÖ, Susanne Fürst, representará al partido en el evento.
En una declaración publicada el viernes, Kickl enfatizó la importancia de permanecer en Austria: “Austria primero”, dijo, haciendo referencia a las actuales negociaciones gubernamentales que requieren su presencia en el país. “Aunque una invitación como esta no es algo trivial, he dejado claro: no, me quedo en casa al lado de nuestra población. Nuestra patria nos necesita ahora”, añadió el líder de la FPÖ.
La decisión de Kickl de no viajar a Washington refleja su enfoque en las prioridades nacionales en un momento en que la FPÖ se enfrenta a desafíos políticos internos. Está convencido de que Donald Trump, quien promueve el lema “America first”, comprenderá su decisión.
De esta manera, Susanne Fürst será la única representante de la FPÖ en la toma de posesión de Trump. Como política experimentada y portavoz de política exterior, tendrá la tarea de representar la posición del partido en un contexto internacional. Su viaje a Washington es visto por muchos como un signo de las continuas relaciones entre la FPÖ y los Estados Unidos, especialmente bajo la presidencia de Trump.
La decisión de Kickl y la participación de Fürst en la ceremonia de toma de posesión se producen en un contexto político marcado por desafíos tanto nacionales como internacionales. Mientras la FPÖ continúa consolidando su posición en la política austriaca, queda por ver cómo se desarrollarán las relaciones con los Estados Unidos bajo la nueva administración de Trump.