
Tras los incidentes ocurridos en Caleta Olivia, que incluyeron agresiones al gobernador Claudio Vidal durante su visita a Caleta Olivia, desde el Sindicato de Petróleos, Gas Privado y Energías Renovables (SIPGER) emitieron un comunicado en donde respaldan la gestión del mandatario y a su vez repudian los hechos de violencia.
El documento difundido lleva el título de “La democracia se construye con dialogo y respeto” y lleva la firma del secretario general de la entidad, Rafael Güenchenen.
El extenso texto llama al dialogo y a la paz social, a la vez que destaca la actitud de Vidal y los ejes de su gestión. También reclama el respeto a las instituciones y rechaza la violencia en todos sus términos.
“Desde el SIPGER reafirmamos que la violencia no tiene cabida en la construcción democrática. Las diferencias deben resolverse con ideas, argumentos y voluntad de entendimiento, nunca con confrontación estéril. Convocamos a todos los sectores políticos, sociales y económicos a sumarse a este llamado a la unidad, respaldando la institucionalidad y el trabajo honesto por el bien común”, dice en uno de sus párrafos más salientes el documento elaborado por el sindicato. En este contexto hace un llamamiento “a la ciudadanía a rechazar cualquier intento de desestabilización y a construir, desde el respeto y el esfuerzo colectivo, un futuro de justicia y prosperidad para las próximas generaciones”.
El documento
“La democracia se fortalece con el diálogo plural, el respeto a las instituciones y la defensa de los principios que garantizan la convivencia pacífica. En tiempos donde la intolerancia amenaza con fracturar el tejido social, desde el Sindicato de Petróleos, Gas Privado y Energías Renovables (SIPGER) manifestamos nuestro firme rechazo a cualquier forma de violencia, sea física o simbólica, que busque socavar los cimientos de nuestra sociedad.
Condenamos enérgicamente las agresiones dirigidas contra el gobernador de la provincia, Claudio Vidal, cuya gestión se distingue por su vocación de diálogo, cercanía con la ciudadanía y compromiso con el desarrollo integral de Santa Cruz. Atacar a quien representa la voluntad popular no solo vulnera la dignidad de un servidor público, sino que constituye un atentado contra la estabilidad institucional y la paz social.
A diferencia de administraciones anteriores, el gobernador Vidal gobierna con presencia en el territorio, recorriendo barrios, industrias y espacios productivos, escuchando a la gente y trabajando en soluciones concretas. Su gestión no se limita a los despachos: lo vemos en contacto directo con los trabajadores, los productores y las familias santacruceñas.
Vidal encarna los valores esenciales de la democracia, apostando al consenso, la escucha activa y políticas que transforman desafíos en oportunidades. Su compromiso con el progreso, basado en el trabajo y la producción, representa un modelo de gestión que trasciende divisiones coyunturales. Los intentos por deslegitimar su trabajo mediante agravios o desinformación desconocen la voluntad mayoritaria de construir una provincia más justa y próspera.
El gobernador decidió con un mandato claro del pueblo: erradicar la corrupción, desterrar la vieja política y frenar el saqueo de nuestros recursos. Está cumpliendo con hechos concretos: inversión en educación, generación de empleo genuino y una firme política de industrialización y terminar con los parásitos que viven del Estado. Quienes buscan frenar este proceso con maniobras desleales se enfrentan a una realidad: el cambio ya está en marcha y no se detendrá.
La máxima autoridad política de la provincia no es la primera vez que debe enfrentar grandes retos, soportar ataques injustificados y operaciones mediáticas. Lo hizo cuando transformó la realidad del gremio que hoy me toca dirigir. Pasamos de tener un sindicato quebrado, dividido y sin fuerza, a ser una de las organizaciones sindicales más importantes y fuertes del país. Estamos seguros de que hará lo mismo con la provincia que tanto ama, defiende y por la que todos los días se levanta y trabaja.
Desde el SIPGER reafirmamos que la violencia no tiene cabida en la construcción democrática. Las diferencias deben resolverse con ideas, argumentos y voluntad de entendimiento, nunca con confrontación estéril. Convocamos a todos los sectores políticos, sociales y económicos a sumarse a este llamado a la unidad, respaldando la institucionalidad y el trabajo honesto por el bien común.
Llamamos a la ciudadanía a rechazar cualquier intento de desestabilización y a construir, desde el respeto y el esfuerzo colectivo, un futuro de justicia y prosperidad para las próximas generaciones.
¡Por una democracia fuerte, una provincia unida y un gobierno que escucha!