El enfrentamiento entre Facundo Manes y Santiago Caputo, asesor del presidente Javier Milei, ha tomado un giro judicial tras la decisión del diputado de presentar una denuncia penal por amenazas. Este conflicto, que se originó durante la apertura de sesiones del Congreso, ha captado la atención de los medios y del público, y podría derivar en una condena de hasta dos años de prisión para Caputo si la denuncia prospera.

Manes, quien ha emergido como un héroe de la oposición en un contexto donde el peronismo se encuentra ausente, ha comenzado a redactar la denuncia con la ayuda de tres abogados. La presentación está programada para este miércoles en una fiscalía cercana al Congreso. La denuncia se basa en el artículo 149 del Código Penal, que penaliza el uso de amenazas para alarmar o amedrentar a una persona, lo que podría llevar a una pena de seis meses a dos años de prisión.

El incidente que desencadenó esta denuncia ocurrió durante una sesión del Congreso y se intensificó en un pasillo, donde Manes y Caputo tuvieron un intercambio verbal acalorado. Según el relato del diputado, Caputo lo amenazó con “tirarle todo el Estado encima” y le advirtió que debería “estar limpio” para hablar del presidente. Testigos del incidente, incluyendo a la diputada Marcela Coli y una periodista de Clarín, corroboran la versión de Manes, quien sostiene que Caputo lo tocó de manera intimidante.

El asesor, por su parte, no ha hecho declaraciones públicas sobre el incidente, pero sus defensores han salido a respaldarlo. Militantes de las Fuerzas del Cielo, agrupación que apoya a Milei, argumentan que las acciones de Caputo no constituyen una agresión y han compartido imágenes y testimonios que contradicen la versión de Manes.

La tensión entre ambos bandos se intensifica, especialmente con la cercanía de las elecciones y el clima político polarizado. La denuncia de Manes no solo busca justicia por el incidente, sino que también destaca las luchas internas dentro del Congreso y el desafío que enfrenta el Gobierno de Milei ante una oposición cada vez más activa.

A medida que se desarrollan los acontecimientos, la atención se centra en cómo la justicia manejará esta denuncia y en las posibles repercusiones políticas que podría tener para el asesor presidencial y para el propio Milei. La situación está lejos de resolverse, y el conflicto promete seguir escalando en los días venideros.

Este episodio no solo pone de relieve la creciente violencia política en Argentina, sino que también plantea preguntas sobre la conducta de los funcionarios y los límites de la confrontación en el ámbito legislativo. La respuesta de Caputo y su equipo a la denuncia de Manes será crucial para determinar el rumbo de este enfrentamiento y su impacto en el panorama político del país.