En un contexto de creciente incertidumbre global, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, ha subrayado la importancia de reforzar las relaciones entre China y la Unión Europea (UE), coincidiendo con el 50 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambas partes. En su discurso, Wang destacó que el comercio bilateral alcanzó cerca de 780.000 millones de dólares en 2024, un notable aumento desde los 2.400 millones de dólares hace cinco décadas.

Wang enfatizó que hay “más razones que nunca” para fortalecer los lazos, basándose en principios de respeto y beneficio mutuo, y llamó a la confianza recíproca en un momento en que las tensiones comerciales globales aumentan, especialmente debido a las políticas arancelarias del presidente estadounidense Donald Trump. Este último ha amenazado con imponer aranceles del 25% a productos europeos, lo que ha llevado a Bruselas y Beijing a buscar alternativas para reducir su dependencia de Estados Unidos.

A pesar de las diferencias, como los aranceles impuestos por la UE a la industria automotriz china en 2024, ambos lados están explorando nuevas oportunidades de cooperación en sectores estratégicos como tecnología, transición energética e infraestructura. El multilateralismo sigue siendo una prioridad compartida, lo que abre la puerta a posibles acuerdos en áreas como la lucha contra el cambio climático y la regulación del comercio digital.

La voluntad de China de fortalecer sus lazos con Europa también se alinea con su estrategia de diversificación económica y su objetivo de alcanzar un crecimiento del PIB del 5% este año, un desafío en el actual panorama económico. La colaboración entre China y la UE podría ser clave para enfrentar los retos globales y asegurar un futuro más estable para ambas partes.