
En un análisis reciente, se ha revelado que el sector de la construcción en Formosa ha sufrido una drástica caída en el empleo registrado durante el primer año de gestión del presidente Javier Milei. Según un informe de la consultora Politikon Chaco, basado en datos del Instituto de Estadística y Registro de la Industria de la Construcción (IERIC) y el INDEC, la provincia experimentó una reducción del 26,9% en la cantidad de trabajadores registrados en este sector, lo que se traduce en la pérdida de casi mil puestos de trabajo.
Este retroceso se atribuye principalmente a la paralización de la obra pública nacional, resultado de los recortes significativos en la administración pública que Milei implementó desde su llegada al poder. Estas medidas han llevado al cierre de organismos y a la eliminación de puestos de trabajo, afectando directamente tanto los ingresos como el poder adquisitivo de los trabajadores de la construcción en Formosa.
A finales de diciembre de 2024, el sueldo promedio en el sector alcanzó los $967.029, lo que representó un incremento del 8,5% interanual en términos reales. Sin embargo, al considerar el acumulado anual, se observó una caída del 15,6% en el poder adquisitivo, lo que agrava la situación de los trabajadores en la provincia.
Formosa se encuentra entre las provincias más afectadas por esta crisis laboral. A nivel nacional, el empleo en la construcción cayó un 11,7% interanual, lo que se traduce en la pérdida de 46.116 puestos de trabajo en todo el país. Formosa, con su caída del 26,9%, se ubica como la sexta provincia con mayor descenso porcentual, solo superada por La Rioja, Santa Cruz, Santiago del Estero, La Pampa y Tierra del Fuego.
El ministro de Economía de Formosa, Jorge Oscar Ibáñez, ha destacado la paralización de obras educativas clave en la provincia, como la construcción de escuelas técnicas en varias localidades. Esta interrupción, atribuida a los recortes de fondos nacionales destinados a infraestructura escolar, no solo afecta a la educación, sino que también impacta negativamente a las empresas constructoras locales que esperan pagos por trabajos ya realizados.
Las perspectivas para el sector de la construcción en Formosa son inciertas, ya que la recuperación del empleo dependerá en gran medida de la evolución de la obra pública y privada en los próximos meses. La paralización de proyectos financiados por el Gobierno nacional complica aún más el panorama, lo que ha llevado a que las expectativas se centren en la continuidad de la obra pública provincial, aunque con un ritmo más lento.
En conclusión, la caída en el empleo registrado en la construcción en Formosa refleja el impacto directo de las políticas de ajuste implementadas por la administración de Javier Milei. A medida que la provincia lidia con las consecuencias de esta crisis laboral, la necesidad de retomar y financiar proyectos de infraestructura se vuelve cada vez más urgente para garantizar un futuro más estable para los trabajadores y las familias de la región.


