
Mariano Cúneo Libarona, abogado penalista y actual Ministro de Justicia de Argentina, es una figura controvertida en el ámbito judicial y político del país. Su carrera ha estado marcada por una serie de casos mediáticos y polémicos que han generado tanto admiración como rechazo. Nacido el 8 de junio de 1961 en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Cúneo Libarona proviene de una familia de abogados y fiscales, lo que le ha permitido tener un acceso privilegiado al mundo judicial desde una edad temprana.
Formación y Primeros Pasos en el Poder Judicial
Cúneo Libarona se graduó como abogado en la Universidad del Museo Social Argentino (UMSA) a los 22 años y posteriormente obtuvo un doctorado en Derecho Penal en la Universidad del Salvador. Desde joven, se insertó en el Poder Judicial, comenzando su carrera como empleado en los tribunales en 1981, donde rápidamente ascendió a cargos de mayor responsabilidad. Su padre, Mariano Cúneo Libarona, fue fiscal ante la Cámara del Crimen, lo que le brindó una perspectiva única sobre el funcionamiento del sistema judicial.
En 1989, Cúneo Libarona dejó el servicio público para dedicarse a la abogacía en el sector privado, donde se destacó como defensor de figuras controvertidas y de alto perfil. Su carrera despegó en la década de los 90, cuando se convirtió en un abogado reconocido por su capacidad para manejar casos complejos y mediáticos.
El Menemismo y Casos Controversiales
Cúneo Libarona se alinea con el menemismo, defendiendo a varios de sus miembros en causas judiciales. Uno de los casos más notorios fue el “Yomagate”, donde defendió a Amira Yoma, cuñada del expresidente Carlos Menem, acusada de tráfico de cocaína. A pesar de la gravedad de las acusaciones, logró que su defendida fuera sobreseída en 1994, lo que consolidó su reputación como un abogado capaz de navegar en las aguas turbias del poder político y judicial.
Su relación con el entorno de Menem se profundizó cuando fue contratado por el propio expresidente para representarlo en diversas causas penales, fortaleciendo así su conexión con el círculo cercano al poder. Cúneo Libarona ha expresado admiración por Menem, a quien considera uno de los mejores presidentes de Argentina, lo que subraya su compromiso con una visión política que prioriza los intereses de los poderosos.
La Causa AMIA y su Detención
Uno de los episodios más oscuros de su carrera ocurrió en 1997, en el marco de la causa AMIA, relacionada con el atentado que dejó 85 muertos en 1994. Cúneo Libarona defendió a Juan José Ribelli, un ex comisario acusado de estar implicado en el atentado. En medio de la investigación, fue detenido por 32 días bajo la acusación de coacción agravada y encubrimiento, tras ser señalado como responsable de ocultar un video que comprometía a otros actores judiciales en la causa. Aunque fue sobreseído por falta de pruebas, su detención marcó un punto crítico en su carrera y dejó una mancha en su imagen.
Defensa de Personalidades Controversiales
A lo largo de su carrera, Cúneo Libarona ha defendido a varias figuras polémicas, desde empresarios hasta celebridades del fútbol. Su defensa de Guillermo Coppola, manager de Diego Maradona, en un caso de narcotráfico, es un ejemplo de su habilidad para manejar casos mediáticos. Coppola fue detenido durante 97 días, pero fue finalmente sobreseído, lo que consolidó a Cúneo Libarona como un abogado de renombre en el ámbito del derecho penal.
Otro caso notable fue su defensa de José Alperovich, exgobernador de Tucumán, acusado de abuso sexual por su sobrina. A pesar de la gravedad de las acusaciones, Cúneo Libarona mantuvo la inocencia de su defendido, argumentando que había una conspiración en su contra. Este caso reflejó las tensiones entre el poder político y judicial en Argentina, y la estrategia de defensa de Cúneo Libarona fue criticada por minimizar la gravedad de los delitos de abuso.
Su Designación como Ministro de Justicia
El 11 de diciembre de 2023, Cúneo Libarona fue designado Ministro de Justicia de la Nación por el presidente Javier Milei, quien lo considera un aliado clave en su agenda política. Su llegada al ministerio fue recibida con críticas debido a su historial y a sus posturas conservadoras, que han sido vistas como un retroceso en los derechos humanos y en la lucha por la igualdad de género.
Una de las declaraciones más polémicas de Cúneo Libarona fue su propuesta de eliminar la figura del femicidio del Código Penal, argumentando que la distinción entre femicidio y homicidio crea una división innecesaria y contraria al principio de igualdad ante la ley. Esta postura ha generado un fuerte rechazo por parte de organizaciones feministas y de derechos humanos, quienes ven en sus declaraciones un intento de desmantelar los avances logrados en materia de derechos de las mujeres.
Críticas y Controversias
Cúneo Libarona ha sido objeto de críticas por su tendencia a defender a figuras poderosas y su aparente falta de compromiso con los derechos de las víctimas. Su historial en la defensa de acusados de abuso sexual y su oposición a los derechos reproductivos han alimentado un discurso regresivo que muchos consideran peligroso en el contexto actual de Argentina, donde la lucha por la igualdad de género y la protección de los derechos humanos es una prioridad.
La figura de Cúneo Libarona se ha convertido en un símbolo de un modelo de justicia que prioriza los intereses de los poderosos sobre los derechos de las víctimas. Su estilo directo y su capacidad para navegar en el complejo entramado del poder político y judicial le han permitido mantenerse relevante en la escena argentina, pero también lo han convertido en un blanco fácil para las críticas.
Conclusiones
Mariano Cúneo Libarona es una figura compleja en la historia judicial de Argentina. Su carrera ha estado marcada por controversias y un enfoque que muchos consideran antidemocrático y regresivo. Desde su defensa de figuras políticas y empresariales hasta su actual rol como Ministro de Justicia, Cúneo Libarona representa una visión del derecho que prioriza el poder sobre la justicia.
Su postura sobre temas de género y derechos humanos ha generado un debate intenso en la sociedad argentina, donde muchos ven su influencia como una amenaza para los avances logrados en la lucha por la igualdad. En un país donde la justicia y la política a menudo se entrelazan, la figura de Cúneo Libarona continúa siendo objeto de controversia y discusión, simbolizando las luchas y tensiones que caracterizan el sistema judicial argentino.


