“Foto de unidad”, “foto incomoda”, “foto de la paz”, “foto necesaria”, fueron algunas definiciones y títulos en medios santacruceños respecto a la publicación de la imagen de la reunión entre el gobernador Claudio Vidal, el vice, Fabián Leguizamón y el diputado Pedro Luxen.
Luego de esto, una catarata de análisis referidos al supuesto contexto y la intencionalidad de la foto; todo para sumar datos de la “panorámica” de la política santacruceña.
Algunos interpretaron la foto como una respuesta a acciones de sectores y espacios políticos de la oposición; otros como una señal para desmentir una supuesta ruptura del oficialismo; y los más audaces, como señales hacia adentro del armado oficialista con vistas a las legislativas.
En términos de análisis político periodístico, son todas teorías muy opinables.
Pero la realidad de la trastienda de la imagen es mucho mas simple de lo que se pretende plantear. Es simplemente “hiper pragmatismo político”, una tendencia cada vez más enraizada en la “praxis” política nacional (desde las elecciones del 2023); y aquellos que no lo han incorporado y manejan las viejas estructuras insisten con viejos modelos y códigos, No sólo en la política, también, y sobre todo en los medios de comunicación.
Tal vez por eso caen en el síndrome de la “noticia deseada”. Este concepto, no es sólo el título del un libro del filosofo y periodista Miguel Wiñazki -que lo expuso hace 20 años atrás- es la trampa en la que caen muchos comunicadores que pretenden que lo que ellos publican tiene un correlato varaz con la noticia. Es posible que sea un relato coherente, pero no necesariamente verdadero.
En términos de “poder de la comunicación”, lo que antes permitía hacer jactancia del periodismo como formador de opinión, hoy lo único que genera es descreimiento.
Según el autor, se trata de  “Sucesos periodísticos arquetípicos, episodios que describen la configuración de la noticia deseada, que dispararon la phantasia popular, en el sentido clásico de la palabra, como constructor de ficciones compartidas”. Ficción versus realidad es lo que se plantea. Básicamente es entender o discriminar si una noticia es realidad o ficción; pero también diferenciar si un comunicador es fiel a la realidad o no; incluso ser líder político o no. Entonces la foto cobra otro sentido y comunica lo que en verdad ocurre en esa instantánea.

Política y liderazgo

La discusión del dialogo publico no es análogo con el dialogo político. Esto también es una realidad que se ignora o se oculta.
Cuando la mayoría de los medios de comunicación interpretan la discusión política; esa comunicación existe, pero habitualmente  sólo se revela lo que los interlocutores quieren.
Son esos “partes de prensa” que abundan. Luego está lo que “trasciende”, esas versiones que surgen de una o varias fuentes con intereses propios.
Pero luego están los hechos que no traslucen por versiones o interpretaciones; son lo que son.
Como ejemplo podemos mencionar el amañado Congreso del PJ que ocurrió recientemente en Río Gallegos, cuando todos los actores sabían que era una puesta en escena instalada para demostrar iniciativa política colectiva cuando en realidad fue una bajada de línea y una toma de poder “de facto” por un sector definido.
En este pretendido nuevo liderazgo del PJ no se blanquearon nombres, pero si metodologías: hubo expulsiones, sanciones y bajadas de línea. Quienes están en política deberían saber que los liderazgos no se imponen; los liderazgo, las conducciones surgen, se construyen y se revelan.
La teoría dice que el liderazgo es ese conjunto de habilidades que sirven para  conducir y acompañar a un grupo de personas. Esa definición académica no habla de expulsar o sancionar; dice claramente “acompañar” para conducir con habilidad.
Los liderazgos no se definen a dedo, ni se toman por asalto; la conducción surge como una necesidad de un grupo de encontrar al “igual” más hábil para liderar.
De allí el concepto romano de “Primus Inter Pares”, el primero entre iguales; entre “compañeros”.
El líder es quien construye, el que dialoga con sus iguales. No el que expulsa, y combate  a sus compañeros de lucha. 
Muchos medios intentaron comprar la fotografía del intendente de Río Gallegos (Pablo Grasso) junto al intendente de El Calafate (Javier Belloni) luego del congreso del PJ con la imagen del gobernador y el vice reunidos para hablar del fin de los privilegios de la función publica; aunque hubiera habido diferencias y peleas anteriores. Pero lo que comunican por contexto las fotos son exactamente lo opuesto.
En la primera, se ve a dos ex candidatos a gobernador derrotados en 2023 que no asistieron al encuentro partidario y que festejan el “golpe de mano” dado.
En la otra, se ve a dirigentes que tienen discrepancias, incluso enojos; pero que pueden sentarse a trabajar por el bien común. En definitiva, los liderazgos no silencian y expulsan, los liderazgos dialogan y suman. La diferencia esta entre ser y no ser.

Deja un comentario