
La escuela “Dejalo Ser”, un centro educativo de referencia ubicado en Adrogué, enfrenta una crisis sin precedentes debido a la falta de actualización de los pagos que recibe del Gobierno. Esta situación pone en riesgo el apoyo educativo de 200 niños con discapacidad, quienes dependen de la institución para su desarrollo y bienestar.
Desde hace un año, la escuela no ha recibido aumentos en los fondos asignados, lo que ha llevado a una situación de supervivencia. María Ester Bentivoglio, licenciada en Ciencias de la Educación y representante legal de la escuela, expresó su preocupación: “Nos está pasando que, debido a la no actualización del nomenclador desde el año pasado, se achica la posibilidad de pagar los sueldos, como lo venimos haciendo durante 32 años”. Este problema no solo afecta a los docentes, sino que también compromete la alimentación de los alumnos, quienes desayunan, almuerzan y meriendan en la institución.
La situación se agrava aún más cuando se considera que la crisis no se limita a “Dejalo Ser”. La red que atiende a personas con discapacidad en todo el país está en una situación crítica. Transportistas, terapeutas y otras organizaciones que brindan apoyo se ven obligados a cerrar sus puertas, dejando a los niños sin el respaldo que tanto necesitan. “Los chicos se quedan sin apoyos que necesitan muchísimo”, lamentó Bentivoglio.
La administración de Javier Milei ha sido objeto de numerosas protestas por parte de diferentes sectores de la sociedad, incluidos jubilados, médicos, docentes y organizaciones que trabajan con personas con discapacidad. A pesar de las manifestaciones, el Gobierno ha respondido con más ajustes y restricciones, lo que ha llevado a una creciente estigmatización de este sector vulnerable.
En este contexto, el Senado ha tratado y aprobado la “Emergencia en Discapacidad”, con el objetivo de actualizar los montos que han estado congelados desde el cambio de Gobierno. Sin embargo, se teme que el Gobierno esté preparado para vetar esta medida, lo que complicaría aún más la situación de las instituciones educativas y de apoyo.
El caso de “Dejalo Ser” es un reflejo de una crisis más amplia que afecta a las personas con discapacidad en Argentina. La falta de recursos y el ajuste en el sector educativo amenazan no solo la supervivencia de las instituciones, sino también el futuro de los niños que dependen de estos servicios para su desarrollo integral. Es imperativo que se tomen medidas urgentes para garantizar que estos niños no se queden atrás y reciban el apoyo que merecen.
