

La Feria Provincial del Libro de Santa Cruz continúa con la agenda de actividades. Este miércoles y jueves se desarrollaron talleres, charlas, una obra de teatro, presentaciones literarias y el Ciclo musical “Voces en Escena”, con cantautores que homenajearon a la canción santacruceña.
La trigésima primera edición de la Feria del Libro -organizada por la Secretaría Estado de Cultura – se está desarrollando con mucha participación de la comunidad que elige las propuestas pensadas en el marco del lema “El sur vive en las Letras.
El miércoles 6, el boletín digital “Lo que puede la escritura” abrió la jornada con una mirada sobre la palabra como herramienta de bienestar, seguido por el Taller de IA para bibliotecas de Miriam Díaz y Diego Pérez (UNPA), que puso en debate el futuro del acceso al conocimiento. En tanto, la salud y la resiliencia también tuvieron su espacio con la charla “Prevención: Superando Temores” de Samuel Olivera.
Ell cine se hizo presente con el Taller de guión cinematográfico a cargo de Fabián Forte, reconocido director de género, que contó con una participación de más de 50 personas interesadas en conocer cómo escribir para el cine.
La literatura se convirtió en protagonista con la presentación de Claudia Ramos, quien compartió su libro “Ecos de Ausencias, Reflexiones sobre el Abismo”. La autora explicó: “El libro se refiere a todo lo que pasó en pandemia, lo que fue y lo que nos dejó. Hablamos del sufrimiento, del dolor, de la desesperanza… cómo somos resilientes frente a todo esto”. Su testimonio conmovió al público, que encontró en sus relatos un espejo de experiencias compartidas.
En paralelo, Juan Fernández presentó “Cartas para cuando sea demasiado tarde”, un proyecto colaborativo junto a Hernán Casciari. “En principio no es una antología, es un trabajo colaborativo. Nosotros hacemos el libro en conjunto y nos vamos corrigiendo uno a uno”, señaló. Y agregó: “Lo interesante es que cambian según a quién va dirigido. Pueden ser cartas ficticias, confesiones, cartas de amor, de desamor, testimoniales… hay de todo un poco”. Su propuesta autogestiva abrió la puerta a nuevas formas de participación cultural.
La feria también celebró la diversidad con la obra inclusiva “Caperucita Sorda” de la Escuela Especial N.º 4 Emuyén, y abrió el debate ambiental con la charla de Gladys Guevara. La Caja de Previsión Social presentó “Tu historia, tu arte, tu lugar”, un libro que rescata memorias y expresiones comunitarias, mientras que Lucila Carrizo compartió “El lado frío de la cama”.
El Ciclo Musical “Voces en escena”, enmarcado en el Programa Atlas Sonoro de Santa Cruz, comenzó el miércoles 6 con el homenaje a Marcela Miranda a cargo de la cantante Selena Valdez. Asimismo, Martín Leoz reafirmó la memoria obrera y la identidad santacruceña con su repertorio.
En tanto hoy, Juane Braccalenti compartió con el público un repertorio que nace de su propia historia de vida y de la raíz folclórica santacruceña. “Básicamente vengo a compartir acá un poco de mi historia de vida y también algunas de mis canciones de raíz folclórico santacruceña, canciones con ritmos de acá, con letras que tienen que ver con nuestra identidad, con nuestros paisajes, con mi vínculo con la Patagonia y con nuestra provincia”, expresó antes de subir al escenario.
Para él, la propuesta del ciclo es una oportunidad de ampliar la experiencia de la feria más allá de los libros: “No solo leernos por los libros, sino también escucharnos y escucharnos a través de la música… es una canción joven que está en desarrollo, y poder compartir nuestro material con el público santacruceño es muy valioso realmente”.
Seguidamente, Mariana Mallada adelantó que su presentación estará marcada por la exploración personal y artística que la acompaña desde sus inicios. “Yo lo que vengo a compartir es un poco de mi proceso creativo, que está muy ligado a mi historia de vida y a mis búsquedas artísticas, así que voy a hacer repertorio propio, algo de lo que ya está subido en plataforma y también algunos temas inéditos”, señaló.
Además, destacó el valor de este espacio colectivo impulsado por Ariel Arroyo y por la comunidad Santacruceños del Viento, que le permitió abrir puertas y generar vínculos con otros artistas: “Esta comunidad de artistas que para mí ahora son amigos me permite justamente eso, el intercambio directo… encontrarnos físicamente y generar el intercambio es lo que más me enriquece”.
Así, las voces de Bracalenti y Mallada se suman a un ciclo que reafirma la vitalidad de la música santacruceña dentro de la feria, mostrando que la palabra y el canto se entrelazan para construir identidad, memoria y comunidad en un mismo escenario.
La feria se consolidó así como un espacio de encuentro donde la palabra, la memoria y la música se entrelazan para dar vida a dos jornadas que reflejaron la riqueza cultural de Santa Cruz y la fuerza de sus voces.

