
El reciente comentario del ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, ha desatado una ola de críticas tras su intento de utilizar una célebre frase de Charly García para justificar un decreto que desregula la Sociedad Argentina de Autores y Compositores (SADAIC). La frase, “Los dinosaurios van a desaparecer”, que originalmente hace referencia a los crímenes de la dictadura cívico-militar en Argentina, fue empleada por Sturzenegger para argumentar que la organización de gestión de derechos de autor es obsoleta y necesita modernizarse.
Desregulación de SADAIC
El Decreto 150/25, firmado por el presidente Javier Milei, permite que los artistas gestionen sus derechos de autor de manera independiente, sin la obligación de pasar por SADAIC. Según Sturzenegger, esta medida busca empoderar a los músicos al permitirles elegir otras entidades con comisiones más bajas y, en su opinión, devolverles la propiedad plena sobre sus obras. Sin embargo, su crítica a SADAIC, a la que calificó de burocrática y poco transparente, se vio opacada por el uso inadecuado de la frase de García.
Un Significado Profundo
La canción “Los dinosaurios”, lanzada en 1983, es un poderoso testimonio de la represión durante la dictadura argentina. La letra no trata sobre la burocracia ni sobre la modernización de instituciones, sino que es un lamento sobre la desaparición de amigos y la advertencia sobre el terror ejercido por el régimen militar. La frase utilizada por Sturzenegger, en este contexto, se convierte en una banalización de los horrores del pasado, equiparando la lucha cultural y la memoria histórica con una reforma administrativa.
Banalización de la Historia
Este no es un caso aislado; la administración de Milei ha sido criticada en varias ocasiones por reinterpretar el pasado argentino de manera conveniente. La elección de frases con una carga histórica tan significativa para justificar políticas actuales demuestra una falta de sensibilidad y comprensión sobre lo que esos términos simbolizan en la memoria colectiva de la sociedad argentina.
La utilización de una frase que representa la resistencia cultural para justificar la desregulación de SADAIC no solo desvirtúa su significado, sino que también muestra una desconexión con la historia reciente del país. En un contexto donde la memoria histórica es crucial, el uso de metáforas que ignoran su raíz semántica resulta inaceptable.
Conclusiones
El intento de Sturzenegger de resignificar la frase de Charly García ha generado un debate sobre la responsabilidad de los funcionarios al utilizar referencias culturales con un peso histórico tan profundo. La desregulación de SADAIC puede ser un tema relevante, pero el uso de símbolos de resistencia cultural para justificar reformas administrativas es un acto que no solo banaliza la historia, sino que también ofende la memoria de aquellos que sufrieron durante la dictadura. En una sociedad que valora su memoria, es fundamental que el lenguaje utilizado por los líderes políticos refleje una comprensión adecuada de su significado y contexto.

