
Para muchos, lo ocurrido este sábado en la Convención provincial de la Unión Cívica Radical era algo que se veía venir; para otros es simplemente una pulseada que ganó Roxana Reyes y por efecto transitivo Eduardo Costa.
Ocurre que la decisión de haber colocado al actual intendente de Puerto Deseado, Juan Raúl «Pirri» Martínez como presidente de la Convención partidaria fue el resultado de una negociación que incluyó a los intendentes Daniel Gardonio (San Julián) y Carina Bosso (Gobernador Gregores) quienes retornaron al redil radical luego de su deserción en 2023 para aportar al triunfo de Por Santa Cruz que llevó a Claudio Vidal a la gobernación.
Lo primero que trascendió es que Gardonio, Martínez, Bosso y Matías Treppo, se habían reunido con el presidente del partido Daniel Roquel y con la diputada nacional Roxana Reyes para «definir» una lista de unidad. Pero básicamente se trató de «escuchar» las condiciones que Reyes ya tenía previsto imponer. Esta era la exigencia para recibir sin reproches ni «pases de factura» a quienes habían encabezado aquella «revuelta interna» que permitió al actual gobernador tener la «pata radical» de su armado político.
«Tabula rasa», «pizarra en blanco»; o «borrón y cuenta nueva»; cualquiera sea la expresión popular que describa una suerte de indulto a aquellos que protagonizaron la implosión de la UCR en el 2023; es la síntesis del presente radical santacruceño.
Reconstrucción o reedición
La convocatoria de este sábado en Puerto Deseado trajo la novedad que el intendente de la localidad anfitriona sería el presidente del Cónclave.
También se mencionó las palabras «consenso» y «mesa política» que serían las ideas sobre las cuales la UCR de Santa Cruz pretendería reconstruirse.
Pero más que una reconstrucción, lo planteado pareciera ser una reedición, ya que todo quedaría como estaba antes de aquel fatídico 2023. Los que impusieron su criterio y los términos del armado fueron Reyes, Gardonio; y obviamente Costa.
En ese contexto un dato que no llamó la atención fue la ausencia del sector que encabeza el actual vice gobernador Fabián Leguizamón; otro de los que se habían sumado al frente electoral que terminó con 30 años de Kirchnerismo en la provincia.
Hay que recordar que quienes encabezaron aquella «revuelta» dentro de la UCR, habían sido intendentes y Presidentes de Comités locales que reclamaban mayor participación en las decisiones, descentralización del partido; pero sobre todo conformar un «frente ganador» luego de tantos años de frustraciones electorales. En contrapartida, en aquella oportunidad fue Reyes la que intentó imponer su candidatura «única» en caso de cualquier acuerdo con otro partido con aspiraciones a poner candidato a gobernador.
Esa postura fue el detonante y no solo los disidentes de la UCR se alejaron, sino también Encuentro Ciudadano y el Pro, que hasta ese momento eran aliados.
Ahora, como si se tratara de una «revancha personal» de Reyes, en la misma localidad que vió la desarticulación e implosión del radicalismo provincial, la diputada nacional comienza a consolidar lo que seguramente será la búsqueda de su re elección en la banca de diputados.
La Convención
«Agradezco a todos los convencionales por volver a elegirme para presidir el órgano máximo de nuestro partido, hoy estamos acá producto del dialogo y del entendimiento de que juntos podemos lograr grandes cosas», fueron las palabras del «Pirri» al asumir la presidencia del organismo.
Luego, las palabras del intendente de Deseado cayeron en todos los lugares comunes en los que puede caer un dirigente que tiene que enviar un mensaje sin incomodar a nadie; incluso a el mismo. Hay que recordar que fue Martínez quien había renunciado a la titularidad de la Convención en el 2023. Además, entre los que «entendieron» que debían «juntarse» nuevamente, estaban los que ganaron sus intendencias en el frente «Por Santa Cruz».
Tal vez superado por la emoción del momento, Martínez consideró que debía insistir en su mensaje conciliador: «es importante volvernos a encontrar como partido. Estamos en un momento trascendental para Santa Cruz. Tuvimos diferencias en el pasado, pero hoy debemos mirar hacia adelante y trabajar todos juntos dentro de la Unión Cívica Radical», expresó.
«Seguimos trabajando por el desarrollo y el crecimiento de nuestra provincia y toda la Unión Cívica Radical está en un mismo camino» dijo Martínez luego de calificar a la UCR como un partido «listo para gobernar»; aunque a la luz de la realidad partidaria, la frase sonó más a expresión de deseo.
Vale mencionar que a Martínez lo acompañan como vicepresidente Luis César Vera y Rubén Delgado y Carina Bosso; como secretarios. Por otra parte, los convencionales aprobaron el mandato para que el Presidente del Partido Daniel Roquel, el Presidente de la convención Juan Raúl Martínez, los intendentes Daniel Gardonio, Carina Bosso y Matías Treppo y otras autoridades partidarias puedan analizar en la conformación de una mesa de acción política a los fines de definir acuerdos electorales.
Reyes única referente
Tras una jornada en la que se dio por satisfecha por los resultados; y por haber podido encaminar su aspiración a retener su banca en el Congreso, Reyes festejó. «Celebramos el entendimiento, la unión y el compromiso de sostener y ordenar la UCR, pensando siempre en construir una alternativa sólida para los santacruceños», expresó.
Entre otras declaraciones que recogieron los medios, la diputada también dijo: «Hoy fue un día importante para la UCR Santa Cruz. Luego de mucho debate y diálogo político, logramos avanzar. Acordamos entre los distintos sectores la renovación de las autoridades de la Convención, el máximo órgano partidario, y dimos un paso clave para seguir fortaleciendo nuestro espacio».
Claramente, será el espacio desde donde Reyes construirá y fortalecerá su candidatura; luego de haber cerrado la negociación en la Convención desde donde comenzará a afianzar su nuevo rol de única referente; detrás de Costa, claro.
Leguizamón acusa
«Nuestro límite es y será siempre Roxana Reyes, entendiendo que junto a Eduardo Costa operando desde las sombras, fue la principal artífice de este acuerdo que termina de demostrar quién es la persona que digita los hilos del radicalismo en Santa Cruz», señaló enfáticamente Leguizamón luego de confirmar que su sector no participaría de esta Convención.
Es que Leguizamón los conoce a todos. En realidad, en la UCR provincial todos se conocen bien; así es que las «fotos de unidad» siempre resultan sospechosas.
Tal vez por esto, el vicegobernador no dudó en apuntar contra sus aun «correligionarios y se refirió a la vuelta de Martínez, Gardonio y Bosso a las filas del oficialismo de la UCR. En este sentido analizó que esta postura: «responde a los intereses personales del Costismo encabezado por Reyes de retener los últimos espacios de poder y la estructura partidaria tras la contundente derrota en las últimas elecciones generales, en las que -por primera vez en la historia- la UCR dejó de ser el principal partido opositor en Santa Cruz para ocupar el tercer lugar».