Buenos Aires
El juez Claudio Bonadio pidió al Senado autorización para allanar los domicilios de Cristina Kirchner, pero por segunda vez consecutiva el oficialismo no consiguió quórum para iniciar la sesión. Volverán a intentarlo el miércoles que viene a las 14 horas.
El bloque del PJ que encabeza Miguel Pichetto sólo sumó 8 senadores y no aparecieron aliados que esperaba Federico Pinedo. Además, tampoco se hizo presente el senador de Cambiemos Esteban Bullrich y solo faltó un asistente para que haya quórum.
Se supo que Bullrich viajó inicialmente a Turquía para seguir de gira por el viejo continente y finalmente verse con el Papa Francisco.
La ausencia de Bullrich y de aliados como Miriam Boyadjian hizo caer la sesión por los allanamientos a la ex mandataria. Tampoco se pudo tratar la ley de extinción de dominio que ya tiene media sanción de Diputados.
Los pedidos de allanamientos a los domicilios de la expresidente y actual senadora Cristina de Kichner, en el marco de la causa por presuntas coimas en la obra pública, deberán seguir esperando para ser ejecutados. Es que la Cámara alta debía tratar hoy si habilitaba o no la solicitud del juez Claudio Bonadio, pero la sesión no alcanzó el quórum necesario para iniciar los debates.
Así, la cuestión se postergó por segunda vez luego de que también la semana pasada se cayó la sesión porque Bonadio envió sobre la hora una documentación que se le había requerido. El Senado puso nueva fecha para el debate: el próximo miércoles a las 14.
En la misma sesión, la Cámara alta iba a tratar el proyecto de extinción de dominio, una figura jurídica que permite al Estado recuperar los bienes obtenidos y usados por el delito, incluido el de corrupción, por lo que éste concepto sobrevolará toda la jornada de debate. Pero quedó con 36 legisladores, a uno del quórum necesario, por lo que no pudo dar inicio a la sesión.
Allanamientos
Los allanamientos a los domicilios que la senadora del Frente para la Victoria (FPV-PJ) tiene en Río Gallegos, El Calafate y la Ciudad de Buenos Aires fueron solicitados por el juez Claudio Bonadio en la causa que investiga los detalles de los cuadernos del chofer Oscar Centeno sobre el presunto pago de coimas por la obra pública a funcionarios de la gestión kirchnerista.
De acuerdo a la Ley de Fueros (25.320) el Senado debe votar si autoriza al juez a realizar los allanamientos, una decisión que divide al Bloque Justicialista que encabeza Miguel Pichetto, del cual depende la aprobación de una iniciativa de este tipo.
En esa bancada hay varios senadores que no quieren aprobar los allanamientos y se diferencian de Pichetto, que se opone a un eventual desafuero sin que haya una condena sobre la ex mandataria, pero avala el procedimiento solicitado por Bonadio, por entender que se trata de “una medida de prueba”.
Esa división en la bancada justicialista hizo que el jefe del bloque anunciara que habrá “libertad de acción” al momento de votar el permiso para que el juez allane los domicilios de Cristina Kirchner.
Uno de los senadores justicialistas que mostró sus reservas frente a la requisitoria de Bonadio fue el formoseño José Mayans, que sostuvo que el pedido de allanamiento “tiende a dar un golpe mediático” y “un poquito también a humillar” a la senadora.
El Bloque Justicialista quedó así en el medio del tironeo entre la bancada oficialista de Cambiemos, que está unánimemente a favor, y el kirchnerismo, que cerrará filas detrás su líder.
La decisión del Senado se postergó el jueves de la semana pasada, dado que los fundamentos de la medida solicitada por Bonadio (que fueron reclamados por el bloque del FPV) llegaron a la Cámara alta minutos antes de la sesión pautada para ese día y con información que se encuentra bajo secreto de sumario.
Por esa razón, Cambiemos y el PJ acordaron postergar su tratamiento hasta este miércoles.
En la previa, Bonadio ordenó este lunes allanar dos departamentos ubicados en el mismo edificio en el que vive Cristina Kirchner, en el barrio porteño de Recoleta, operativo que fue calificado como “un gran circo” y un “amedrentamiento” por parte del abogado de la senadora, Gregorio Dalbón.
Extinción de dominio
Por otro lado, se iba a tratar también el proyecto de ley de extinción de dominio que se encuentra trabado desde hace más de un año, aunque los tres bloques principales llegarán al recinto con posturas distintas, por lo que el resultado está abierto.
La extinción de dominio es la figura jurídica que permitiría al Estado hacerse con bienes obtenidos por medio de actividades ilícitas o utilizados para ellas, pero Cambiemos, el Bloque Justicialista y el Frente para la Victoria tienen visiones diferentes sobre el contenido y los alcances de la iniciativa.
Hace dos semanas, en la Comisión de Justicia y Asuntos Penales, los senadores de esos tres espacios presentaron dictámenes diferentes y el que más firmas obtuvo fue el del PJ, por lo que será el primero en tratarse.
La iniciativa del justicialismo sostiene que la extinción de dominio debe ejecutarse en el fuero penal una vez que exista una sentencia de primera instancia, mientras que el dictamen de Cambiemos le otorga al fuero civil la potestad de dictar la medida y de hacerlo antes de que haya condena.
El dictamen del kirchnerismo, en tanto, plantea que la extinción de dominio debe alcanzar también a los delitos económicos, especialmente cuando se trate de corrupción: el ejemplo característico es el de las coimas, con la idea de que la extinción no se aplique sólo al funcionario que la cobre, sino también a la persona que la pague.
De esta manera, si bien el primer proyecto en ser sometido a votación será el del justicialismo, la redacción final está abierta a posibles modificaciones que unifiquen los criterios de todas las bancadas.
En 2016 la Cámara de Diputados aprobó un proyecto de extinción de dominio pero el Senado nunca lo trató porque el Bloque Justicialista consideró que tenía varias falencias y, el año pasado, intentó sin éxito consensuar una serie de modificaciones con Cambiemos, principal impulsor del tema.
Finalmente, este año la bancada que encabeza Miguel Pichetto presentó una iniciativa nueva y reactivó el debate, que culminaría este miércoles con la votación de un proyecto que deberá ser girado a la Cámara de Diputados.