Buenos Aires
El ex vicegobernador de Santa Cruz cuando el mandatario provincial era Néstor Kirchner, dio detalles de aquel momento y lo que el ex presidente le reveló que guardaría allí
Eduardo Arnold, el ex vicegobernador de Santa Cruz cuando el mandatario provincial era Néstor Kirchner, aseguró haber visto “la primera bóveda” del kirchnerismo en El Calafate. Y que fue la propia Cristina Kirchner quien se la mostró.
“Es para guardar las cajas que compramos del desguace del Banco Hipotecario”, le reveló en ese momento.
Según recordó Arnold –en aquel entonces era el titular de Yacimientos Carboníferos de Río Turbio– una tarde antes de volar hacia Buenos Aires, pasó a ver a Néstor Kirchner para hablar de cosas de trabajo. “Él no estaba, creo que había ido con el Tango (el avión Presidencial) al dentista o a buscar los diarios a Río Gallegos. Y me recibió ella”.
Arnold conocía cómo el matrimonio había comenzado a construir su chalet en El Calafate. “Primero hizo el parque y después la casa”. Ese día, recuerda, Cristina estaba sola, lo invitó a almorzar y después le mostró cómo iba la obra.
En declaraciones a Radio Mitre, dijo que de aquel día dos cosas le llamaron poderosamente la atención: “Era un espacio hexagonal u octogonal de unos 10 metros de diámetro, y no tenía ventanas, a pesar de que estaba frente al lago”.
“Por lo general cuando uno tiene una vista así pone ventanales para poder apreciar ese espectáculo. Le pregunté directamente si habían dejado lugar para las ventanas y me dijo: no no, el living va arriba, esto es la bóveda”, recordó.
Sorprendido por las características del lugar, el ex vicegobernador le consultó de qué se trataba: “Le pregunté para qué y me dijo que ahí iban las cajas que se compraron en el desguace del Banco Hipotecario”.
Arnold recordó también un textual de Cristina Kirchner: “Vamos a guardar todo acá”, le dijo.
Arrepentido
El martes, Claudio Uberti –quien estaba a cargo del OCCOVI– se convirtió en el primer arrepentido K y contó aspectos hasta hoy desconocidos del esquema de recaudación de coimas. En ese marco también recordó que los Kirchner tenían bóvedas en la casa que tenían en Río Gallegos. En este sentido, Arnold fue contundente: “Es muy probable que no le haya alcanzado la bóveda de El Calafate; eran muchas cajas, cajas grandes, inmensas, de un acero muy seguro”.
Finalmente, el ex vicegobernador agregó: “Probablemente hayan tenido cajas en otras casas o en las estancias que compró Lázaro Báez en su momento”.
Mientras avanza la causa de los cuadernos de las coimas K, en la que ya están involucrados decenas de ex funcionarios de la administración anterior y empresarios de la construcción, el Ministerio de Seguridad ofreció una recompensa destinada a recuperar todo el dinero robado.