Cañadón Seco
Santa Cruz se encuentra en la antesala de una nueva Ley de Coparticipación de recursos fiscales provinciales y nacionales hacia municipios y comisiones de fomento, la cual reemplazará a una normativa perimida que data de varias décadas y responde a un desactualizado contexto de provincia, a pesar de haber tenido algunas enmiendas menores con el transcurrir de los años.
A los reclamos y cuestionamientos que se incrementaron en los últimos meses, sobre todo de jefes comunales, se le sumó un proyecto que en la última sesión ordinaria virtual de la Cámara del Pueblo presentara el diputado que representa al municipio de Río Gallegos, Eloy Echazú (Frente de Todos).
Igualmente se espera el ingreso de otro que elevaría el Poder Ejecutivo, cuyo contenido por ahora se desconoce y todo indica que habrá un fuerte debate, más aún si el bloque minoritario opositor (Nueva Santa Cruz) fija su propia postura.
Resulta una incógnita saber cómo se modificarán los porcentajes de esos recursos fiscales que devienen de regalías petroleras y gasíferas, mineras e impuestos provinciales, por citarse algunos ítems. Si la distribución se limita solamente a la cantidad de habitantes, debe tenerse en cuenta que el último censo poblacional data del 27 de octubre de 2010 y quedó inconcluso porque justamente ese día se produjo el fallecimiento de Néstor Kirchner.
Equidad y solidaridad
En este complejo panorama, el presidente de la Comisión de Fomento de Cañadón Seco, Jorge Marcelo Soloaga marcó que “la cuestión no pasa solamente por definir porcentajes de distribución de los recursos fiscales que percibe la provincia hacia las comunas”.
“Aquí es imprescindible entender que deben compartirse con equidad para que los pueblos puedan resolver sus problemas y se pueda responder a las demandas de la gente de cada comunidad porque coparticipar significa asumir el acto institucional solidario más importante y trascendente en la Santa Cruz de este tiempo y de los tiempos que vienen”, puntualizó.
Para refrendar sus dichos resaltó que es necesario “consolidar el principio elemental de comunidad organizada” y por ello debe darse una discusión imprescindible que responda a los tiempos actuales. “Postergarla o negarla sería un acto de lesa territorialidad y si esa discusión se niega o se estanca, también se estancarán los acuerdos esenciales. Si eso ocurre, sucedería lo mismo que cuando se estanca el agua: se pudre”, resaltó.
Con todo, el planteo concreto de Soloaga que hará llegar a diputados, además de lo solicitado a distintos legisladores provinciales respecto de distribuir el 50 % de las regalías mineras, es que el 28 % de los recursos fiscales totales que ingresan a la caja provincial se deben transferir a las comunas, contra el 12 % que hoy se coparticipa, en base a la estructura de distribución que a continuación se detalla: el 20% de la coparticipación nacional. Actualmente se distribuye el 11 %. El 40 % de los tributos de jurisdicción provincial. El 40 % de las regalías hidrocarburíferas. Actualmente se coparticipa solo el 7 %. El 50 % de las regalías mineras. Hoy no se coparticipa. Con el 5 % de lo que de esa ecuación resulta se debe conformar un Fondo Fiduciario Fiscal (FFF) para compensar asimetrías, cubrir brechas fiscales y brechas de desarrollo sustentable para lo cual se debe crear el Consejo Provincial de Distribución de Recursos Fiscales. “Un sistema de coparticipación que federalice y distribuya con equidad, que garantice autonomía y soberanía comunal y que de sustentabilidad a los pueblos debe discutirse con los actores estratégicos de la comunidad y no quedar cerrada a un ámbito institucional acotado, porque con ésta ley se discute la Santa Cruz de este tiempo y de los tiempos que vienen”, señaló.