Buenos Aires
En el Día Mundial contra el Cáncer de Pulmón, distintos especialistas del país y América Latina explicaron por qué esta enfermedad sigue creciendo a pesar de las campañas antitabaco. Los números que preocupan en la Argentina
El cáncer de pulmón es uno de los principales asesinos silenciosos del mundo: cobra cerca de tres vidas por minuto, 4000 vidas por día y 1,59 millones de vida cada año.
La enfermedad es particularmente preocupante en América Latina, causando aproximadamente 74.600 muertes por año, mucho más que cualquier otro tipo de cáncer en la región.
Y lo peor es que en Latinoamérica y el Caribe se espera que más de 97,193 personas mueran a causa de la enfermedad para el 2020.
En Argentina, cada año se diagnostican más de 11.000 nuevos casos de cáncer de pulmón, según cifras del Instituto Nacional del Cáncer. Si bien la prevalencia de la enfermedad es mayor entre los hombres (68,45 por ciento para ellos y un 31,55 por ciento para las mujeres), es particularmente preocupante el aumento de la mortalidad por este tipo de cáncer en las mujeres.
De acuerdo a cifras del Ministerio de Salud de la Nación, solamente en 2015 se registraron 9.970 muertes por cáncer de pulmón, incluyendo también las neoplasias de bronquios y tráquea.
En cuanto a la relación por género, mientras que hasta hace relativamente poco tiempo se presentaba con mucha mayor frecuencia en los hombres, esa tendencia se está revirtiendo: cifras del Instituto Nacional de Cáncer de la Argentina indican que sobre 11.244 nuevos casos diagnosticados en 2012, 7.690 correspondieron a hombres y 3.554 fueron mujeres, lo que muestra que de cada 3 pacientes diagnosticados uno es una mujer.Factores
Si bien entre los principales factores de riesgo para desarrollar un cáncer de pulmón se encuentran principalmente el tabaquismo y luego padecer EPOC o tener antecedentes en la familia de cáncer en general, y sobre todo de cáncer de pulmón en particular, existe un grupo de pacientes, entre el 10 y el 15% del total, que jamás ha fumado o que son ex fumadores y que no presentan ninguno de estos factores de riesgo.
“Con una detección precoz, el cáncer es una enfermedad que tiene cura. Por el contrario, si se detecta tardíamente se puede controlar pero seguramente no lograr una mejora en el paciente. Cuando ya aparecen síntomas como tos, perdida de excesiva de peso o secreciones con sangre, nos encontramos frente a un caso en estado avanzado. En el Instituto Flemming existe un programa de detención temprana que consta de tomografías de baja intensidad anuales que invitan a una prevención segura”, subrayó el doctor Claudio Martin jefe de oncología toráxica del Instituto Medico Alexander Flemming y secretario general de la Asociación Argentina de Oncología Clínica (AAOC).Síntomas
Por eso, los especialistas insisten en la importancia de la visita periódica al médico y en la atención de algunos síntomas que, pese a que no siempre se presentan y que podrían corresponder a cualquier otra condición, también en ocasiones son manifestaciones del cáncer de pulmón.
Entre ellos, se destacan la tos o cambio en el tipo de tos, falta de aire o falta de apetito, situaciones generalmente atribuidas a la edad, el estrés o a estados gripales.
Otros signos a los que también recomiendan estar alerta son esputos con sangre, dificultades para respirar, infecciones frecuentes en los pulmones, ‘pitidos’ o ruidos al respirar, ronquera o cambios en la voz, sensación de que la comida se queda detenida en el tórax, bultos o masas en el cuello o en la clavícula, fatiga, pérdida de peso y dolor de huesos.
La doctora Claudia Bagnes, médica oncóloga y Jefa del Servicio de Oncología del Hospital General de Agudos Enrique Tornú, explicó a Infobae que “en algunos países se está evaluando la realización de un screening (chequeo) masivo de cáncer de pulmón, que consistiría en una tomografía computarizada de pulmón una vez, exponiendo al paciente a bajas dosis de radiación, y luego su repetición anual según los factores de riesgo de cada individuo y al criterio médico. En Estados Unidos, ya se está haciendo y es un tema que está discutiéndose en la comunidad médica mundial”.
El gran problema es que es una enfermedad que no da síntomas, o éstos son muy confundibles con otras patologías, hasta tanto el cuadro está avanzado. “Lamentablemente, en el 70% de los casos llegamos al diagnóstico en un estadio local medianamente avanzado o avanzado, y pese a que en la actualidad contamos con un abanico de terapias disponibles muy efectivas, cuando llegamos tan tarde el pronóstico suele ser menos alentador”, puntualizó Bagnes.