Por Claudio Pagano
Libertad de expresión: la libertad de expresión es el derecho fundamental que tienen las personas a decir, manifestar y difundir de manera libre lo que piensan sin por ello ser hostigadas.
Como tal, es una libertad civil y política, relativa al ámbito de la vida pública y social, que caracteriza a los sistemas democráticos y es imprescindible para el respeto de los demás derechos.
En la democracia, la libertad de expresión es fundamental porque permite el debate, la discusión y el intercambio de ideas entre actores políticos y demás integrantes de la sociedad en torno a temas de interés público. Es por ello que no podemos considerar como democrática una sociedad donde no haya libertad de expresión.
Por otro lado, la libertad de expresión es una manifestación real y concreta en el espacio público de otra libertad esencial para la realización personal de los seres humanos: la libertad de pensamiento.
Sin embargo, la libertad de expresión implica deberes y responsabilidades, fundamentalmente para proteger los derechos de terceros, del Estado, del orden público o de la salud moral de la ciudadanía. Por ejemplo, incurren en excesos quienes hagan propaganda a favor de la guerra, apología del odio, manifiesten intolerancia racial o religiosa, o inciten a la violencia o a realizar acciones ilegales.
La censura
La libertad de expresión tiende a ser amenazada por un instrumento que utilizan los regímenes antidemocráticos (dictaduras abiertas o autoritarismos que mantienen formalidades de democracia): la censura. Cuando no hay libertad de expresión o cuando esta está amenazada, los medios de comunicación sufren formas de censura, directas o indirectas, MEDIANTE PRESIONES, HOSTIGAMIENTO, ATAQUES O AMENAZAS DE CIERRE.
Una de las formas más graves de coartar la libertad de expresión en un país es la censura previa, que implica impedir a las personas manifestar lo que piensan; lo cual es distinto a la responsabilidad posterior, que se refiere a que una persona puede decir lo que piensa libremente, pero debe enfrentar las consecuencias penales (si las hubiera) de sus palabras.
La censura no se limita a los medios de comunicación, sino que es empleada en otros ámbitos de la expresión humana, como el cine, la literatura o la música.
Según la ONU
Según la Organización de la Naciones Unidas (ONU), la libertad de expresión es un derecho humano, y se encuentra recogido en el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que establece: “Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”.
Libertad de prensa
La libertad de prensa, una de las características de sociedades con libertad de expresión plena, es el derecho de los medios de comunicación (prensa, radio y televisión, tanto tradicional como digital) de investigar, informar y difundir informaciones sin ningún tipo de limitaciones, COMO LA CENSURA PREVIA, EL ACOSO O EL HOSTIGAMIENTO.
Uno de los mecanismos más directos para amenazar la libertad de prensa es a través de la censura previa.
La censura previa referida a la libertad de prensa consiste en prohibir la difusión de determinados contenidos por decisión de censores oficiales, es decir, funcionarios designados por el Estado para ejercer control sobre la naturaleza de los contenidos que los medios difunden al público.
La censura, asimismo, puede ser indirecta cuando se vale de presiones, hostigamiento, ataques o amenazas de cierre de medios. De allí que, según la Convención Americana de Derechos Humanos (CADH), independientemente de que el sistema legal y político de un país no tenga disposiciones específicas orientadas a disminuir o atacar la libertad de prensa, puede considerarse que esta ha sido vulnerada si son empleados medios indirectos coactivos, como el control del suministro de papel (caso de periódicos), de frecuencias radioeléctricas, o de enseres o aparatos usados en la difusión de información, impidiendo así la libre difusión de ideas y opiniones.