Caleta Olivia
Que el tramo de la ruta nacional 3 entre ésta ciudad y Comodoro Rivadavia es “desastroso” no es una novedad. Aunque lo trascendente es que cada día suceden más imprevistos en los automovilistas que circulan por ese tramo.
La calzada en más de un 80 por ciento de su tramo, no solamente cuenta con largos tramos de baches, sino que además esta plagada de “pozos” ( verdaderos cráteres) que son trampas para quines se desplazan sobre la deteriorada cinta asfáltica; principalmente aquellos que no conocen la zona.
En los últimos días, Diario Más Prensa recibió más denuncias que las habituales por roturas en los vehículos, y en menor medida, quejas de automovilistas que arriesgaron su vida por realizar maniobras peligrosas por esquivar uno de los “cráteres” en medio de la calzada.
Meses atrás, preocupado por la situación un enfermero del Hospital Zonal fue quien se trasladó hasta cercanías de la zona denominada La Lobería, llevó bolsas de cemento, preparó mezcla con anticongelante y acelerante hidrófugo y reparó uno de los cientos de pozos.
Entre las quejas de los automovilistas detallaron la rotura de llantas, de neumáticos y hasta de importantes roturas en tren delantero.
El martes por la madrugada, una familia quedó varada al costado de la ruta luego de que un pozo rompiera dos ruedas y dañara el tren delantero. Por fortuna el conductor logró controlar la unidad y pudo estacionar en la banquina. Pero allí advirtió que carecía de “señal de teléfono”. Con lo cual debió caminar algunos kilómetros para poder pedir auxilio. Pero esto es un incidente casí menor teniendo en cuenta que el estado de la ruta, hace que viajar entre Comodoro y Caleta sea exponerse a un posible accidente.

Lázaro
La obra de la autovía Caleta Olivia – Comodoro Rivadavia, debía ser construída por Austral Construcciones, del empresario kirichnerista Lázaro Báez.
La obra estuvo ocho años manos del empresario K, con un avance del 37 por ciento y donde cobró sobreprecios del 300 por ciento.
Actualmente con un presupuesto de $ 1.569.507.193 CPC, la constructora de Cristóbal López se quedó con la licitación.