Luego de barajar varios nombres, el presidente Alberto Fernández se inclinó por el ex gobernador bonaerense, quien supo potenciar su actividad como embajador a partir de un fuerte perfil productivo que favoreció las exportaciones nacionales con el vecino país.

El Presidente le ofreció el cargo al embajador en Brasil en una llamada telefónica desde la Quinta de Olivos y Daniel Scioli lo aceptó de inmediato, dejaron entrever fuentes del Poder Ejecutivo.

El ex vicepresidente durante la gestión de Néstor Kirchner había asistido el último viernes al acto por los 100 años de YPF que encabezaron tanto Alberto Fernández como la vicepresidenta Cristina Kirchner. A su vez, venía de participar del acto de lanzamiento de la temporada de invierno 2022, fuertemente enfocada a la actividad comercial y turística.

La designación de Daniel Scioli, para apaciguar los ánimos

El perfil de Daniel Scioli enfocado a la gestión y el diálogo permanente con los sectores de la producción, habría inclinado la balanza en la decisión de Alberto Fernández frente a otras opciones que se manejaron durante la tarde.

Entre algunos de los nombres puestos en danza circularon los de la diputada nacional Victoria Tolosa Paz y Augusto Costa, actual ministro de Producción Ciencia e Innovación Tecnológica bonaerense (su nombre ya había sido mencionado pero perdió fuerza por ser un hombre clave en la gestión de Axel Kicillof). También se mencionó a Cecilia Todesca, actual secretaria de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería.

La designación de Daniel Scioli intentará calmar los ánimos luego de la inusitada escalada en la interna oficialista tras el acto por los 100 años de YPF.

Cuando el reencuentro entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner parecía simbolizar una tregua, las contestaciones en “off” a los dichos de la vicepresidenta enfurecieron al kirchnerismo y salieron a la luz tras la respuesta difundida por la empresa pública Energía Argentina (ENARSA).

A través de un comunicado, buscaron desarmar la “operación” que, según denunciaron, provino del Ministerio de Desarrollo Productivo, a cargo de Matías Kulfas.

Fue una declaración de guerra. Cabe recordar que Kulfas fue uno de los apuntados, junto con Martín Guzmán, por el dirigente de La Cámpora cercano a CFK, Andrés Larroque. Ahora también quedó expuesto por la vicepresidenta.

“Muy injusto y, sobre todo, muy doloroso que este tipo de ataques lo ejecuten funcionarios del propio gobierno del Frente de Todos”, lanzó Cristina Kirchner a través de su cuenta de Twitter. Si alguien esperaba que las diferencias se saldaran a puertas cerradas, ya puede olvidar esa idea.

Pero no quedó ahí, la vicepresidenta fue más allá y aseguró que “lo peor de todo” es que estas jugadas se hicieron “sin dar la cara, en off, mintiendo y utilizando periodistas. Con errores y aciertos, siempre hablé y actué de frente”, antes de concluir con el calificativo de “Penoso”.

Con el revuelo que generó este mensaje de Cristina Kirchner, el presidente Alberto Fernández evitó dejar que pase el tiempo e inmediatamente salió con una respuesta pública en medio del escándalo, en donde no negó que se haya producido la denunciada operación de prensa y replicó la información provista por la vicepresidenta.

«Comparto la respuesta dada por Energía Argentina a una publicación fundada en un supuesto off salido de funcionarios del Gobierno», señaló el presidente junto con el comunicado de ENARSA.

«Confío en la integridad moral y en la idoneidad de quienes llevan adelante la licitación del Gasoducto Néstor Kirchner», cerró.