El hecho ocurrió en esta localidad, pero la acusada tiene 25 años.
La denuncia la hizo su padre en la Seccional Tercera de Policía. Expuso que le habían robado 7,3 millones de pesos que tenía guardados en su casa. El hombre, de 55 años, aclaró que no se trataba de ladrones desconocidos sino que la responsable era su propia hija, de 25 años.
Según el damnificado esa cifra significa los ahorros de toda su vida, y al saber de la acción de su hija la llamó por teléfono para pedirle explicaciones y hacerla recapacitar de que le devolviera su dinero. Sin embargo, lejos de arrepentirse, ella le brindó una insólita explicación que lo dejó perplejo.
«Cualquier adolescente que se encuentre esa plata haría lo mismo», le habría respondido a través de un mensaje de WhatsApp.
Pero «no es una adolescente, tiene 25 años», se indicó, dando cuenta que es una mujer mayor de edad.
Incluso, se supo que llegó a decirle a su padre que ya se había gastado ya medio millón de pesos y que no tenía intenciones de devolver el resto porque ese dinero no le pertenecía. «La plata no la vas a volver a ver porque yo sé que es robada», le retrucó la joven a su padre, según pudo saber Infobae de fuentes policiales. Ante la insistencia y desesperación del hombre, ella decidió bloquearlo no solo de su teléfono sino también de sus redes sociales.
Las mismas fuentes policiales aseguraron que «la plata no fue sustraída del domicilio del hombre sino de una habitación del Hotel Rodas, en la calle Matheu, donde el hombre estaba parando. Lo extraño es que hasta ayer por la noche se hospedaba allí y nadie sabe por qué», precisaron.
Para darle veracidad a su relato, el damnificado aportó como pruebas las conversaciones que había mantenido por su hija por chat.
«Tampoco sabemos si existió o no esa cantidad de dinero y cuál es su procedencia. Es una suma importante que para retirar de un banco se necesitan varias autorizaciones. Ni siquiera sabemos a qué se dedica este hombre», aseguró una fuente policial. «Dijo que había extraído la plata el miércoles y la verdad que tuvo mucha suerte en que se lo dieran ese mismo día», señalaron.
Tras tomarle la declaración, la policía tenía entre tres y cinco días para armar el sumario y enviárselo al Juzgado de Instrucción N° 2, a cargo del Juez Contreras Agüero, Secretaría N° 2 y Fiscalía N° 2 por subrogancia a cargo de Martín Sedan.
Pero no hizo falta porque cerca de las 19 horas de ayer volvió a presentarse en la comisaría para ampliar la denuncia y contar que había ubicado a su hija y recuperado su dinero. «Lo que no quedó claro es cuánto le devolvió», admitieron.
De todas maneras, más de allá que la joven haya actuado de esa manera y estado prófuga durante varias horas, «la Justicia establece que robarle a una familiar ascendente o descendente no constituye un delito», detallaron. «Es como robarse así mismo», agregaron.
Finalmente, la denuncia fue retirada por el hombre. «Nos dijo que dejáramos de buscarla e investigar porque prefirió que todo quedara en familia», concluyeron.