Desde Ballena Azul, a Momo Challenge y hoy, Blackout challenge, el reto viral sigue alertando por contar con nuevas víctimas. Consejos sobre cómo lograr hábitos digitales saludables y cómo minimizar los riesgos de la navegación en Internet.
Los retos virales muchas veces son tendencias por una buena causa como en su momento fue el conocido ice bucket challenge para concientizar sobre la realidad de la esclerosis lateral amiotrófica el #BananaDropChallenge que propone un inofensivo baile entre usuarios. Pero muchas otras, son tendencias que pueden poner en riesgo la salud de los niños, niñas y adolescentes. Por eso, Argentina Cibersegura, Asociación Civil cuyo objetivo es concientizar a la comunidad sobre el uso seguro de Internet y las tecnologías, comparte de qué manera se puede como adultos orientar a las nuevas generaciones sobre hábitos digitales saludables y minimizar los riesgos de la navegación en solitario.
Todos los días, la tecnología presenta nuevos escenarios. Para los adultos, como inmigrantes digitales, se necesita información que ayude a estar cerca de la cotidianidad los más pequeños en el mundo online. Este tipo de situaciones empujan a una situación muchas veces incomoda, que provocan ingresar en ámbitos que, hasta incluso cuesta entender. Pero es importante contar con información para iniciar el dialogo con las infancias, ya que es la única manera de acompañarlos en la experiencia y evitar que caigan en engaños o situaciones que puedan provocarles algún mal.
«En la actualidad, es cada vez más difícil que niños y niñas se mantengan rodeados únicamente de contenidos aconsejados para la infancia. En este sentido, el formar para habitar el espacio digital desde edades tempranas, tiene el mismo desafío que hacerlo para el mundo físico. Los y las menores se encuentran expuestos en Internet ante la tentación de «pertenecer» o de sentirse presionados por su entorno a aquella tendencia que se crea en redes sociales», comentan desde el equipo de mentores educativos de Argentina Cibersegura.
Consejos para acompañar a las infancias en sus interacciones en el mundo digital:
· Informarse sobre las novedades que cada día ocurren en Internet.
· Conocer cuáles son los sentimientos y pensamientos que a los y las niñas les nacen al visualizar o vivir experiencias de juegos/retos en línea.
· Generar un espacio de comunicación que propicie el diálogo, evitando los prejuicios negativos de la mirada adulta.
· Lograr transmitirles la seguridad de que cada vez que nos necesiten, estaremos al lado suyo para acompañar y evitar dudas.
· Indicar con claridad los pasos a seguir cuando se enfrenten a situaciones que no pueden manejar, de qué manera pedir ayuda y a quién. Lo importante es que siempre logren hablar.
· Reconocer las señales cuando hay cambios en los estados de ánimo o en las rutinas, entendiendo que, también, podrían deberse a «algo» que está ocurriendo en internet.
· Reportar los contenidos indebidos en las plataformas.
· Evaluar la incorporación de herramientas de control parental en dispositivos, entendiendo que no reemplazan, pero sí acompañan la crianza.
«Es importante acompañar a los más pequeños en su experiencia en el mundo digital generando un vínculo de confianza que preste al diálogo y al entendimiento para saber qué hacen las infancias en Internet más allá de las herramientas de control que se pueden aplicar. Un buen comienzo es estar al tanto de cuáles son las redes sociales del momento, qué retos virales tienen mayor relevancia y qué juegos o aplicaciones son las que los chicos más utilizan. Son ellos mismos los que tienen el poder y pueden decidir qué contenidos ver y cuáles no y para esto, debemos enseñarles que si se encuentran ante algún tipo de material violento no tienen por qué verlo y pueden cerrar la ventana o la aplicación y avisarle a un adulto. Hablar con ellos, preguntarle, comentarle y mantenerse mutuamente informados», aconsejan.