Un soldado de la Bundeswehr alemana de Baviera se negó a vacunarse contra el coronavirus. Ahora tiene que pagar una multa de 4500 euros, por negarse a obedecer. Como soldado, estaba obligado a tolerar medidas médicas en contra de su voluntad.
Karin SIlvina Hiebaum
Orden y obediencia: la máxima básica de la militarismo aparentemente también se aplica a intervenciones tan personales como la vacunación contra el Covid 19. Así lo veía ahora al menos un tribunal en Augsburgo, Baviera. Condenó a un soldado de la Bundeswehr a una fuerte multa de 4500 euros por negarse a vacunarse contra el coronavirus en noviembre de 2021.
Una violación grave de la obligación de tolerar en la Ley de Soldados, como ya determinó la fiscalía en su procedimiento de investigación. Ella incluso exigió una multa de 6000 euros por negarse a obedecer. En contra, el soldado acudió a los tribunales.
Y perdió. Porque los soldados, según el tenor de la sentencia, están obligados a tomar medidas médicas en contra de su voluntad si sirven para prevenir o combatir enfermedades transmisibles. Sin embargo, el tribunal redujo la multa a 4500 euros.
Gericht verurteilt ihn zu 4500 Euro Strafe
Ein Soldat der deutschen Bundeswehr aus Bayern verweigerte die Corona-Impfung. Jetzt muss er 4500 Euro Strafe zahlen – wegen Befehlsverweigerung. Als Soldat sei er verpflichtet gewesen, ärztliche Maßnahmen gegen seinen Willen zu dulden.
Austria Noticias Online
Befehl und Gehorsam – die Grundmaxime des Soldatentums gilt offenbar auch bei so persönlichen Eingriffen wie einer Impfung gegen Covid 19. So sah es jetzt zumindest ein Gericht im bayerischen Augsburg. Es verurteilte einen Soldaten der Bundeswehr zu einer deftigen Geldstrafe von 4500 Euro, weil er sich im November 2021 geweigert hatte, sich gegen Corona impfen zu lassen.
Ein grober Verstoß gegen die Duldungspflicht im Soldatengesetz, wie schon die Staatsanwaltschaft in ihrem Ermittlungsverfahren feststellte. Sie forderte gar eine Geldstrafe über 6000 Euro wegen Gehorsamsverweigerung. Dagegen ging der Soldat vor Gericht.
Und verlor. Weil Soldaten – so der Tenor des Urteils – verpflichtet sind, ärztliche Maßnahmen gegen ihren Willen vornehmen zu lassen, wenn sie der Verhütung oder der Bekämpfung übertragbarer Krankheiten dienen. Das Gericht reduzierte die Geldstrafe allerdings auf 4500 Euro.