El título Putin Deconstruido de Marcelo Montes refleja un enfoque analítico profundo sobre la figura de Vladímir Putin, descomponiendo sus características políticas, personales e ideológicas para entender mejor su liderazgo. «Deconstruido» implica que Montes examina a Putin más allá de las simplificaciones habituales, abordando no solo su papel como líder autoritario, sino también las múltiples dinámicas que lo han consolidado como una figura clave en la política internacional.
El libro Putin Deconstruido de Marcelo Montes ofrece un análisis profundo sobre la figura del presidente ruso Vladímir Putin y su influencia en la política global. Montes utiliza el concepto de «deconstrucción» para explorar las múltiples facetas del líder ruso y entender cómo logró consolidarse en el poder en un momento crucial para la Rusia post-soviética. El autor descompone las estrategias políticas y diplomáticas de Putin, que le han permitido proyectar una imagen de estabilidad tanto a nivel interno como en el ámbito internacional.
Montes argumenta que, aunque Putin es criticado tanto por la izquierda comunista como por la derecha ultranacionalista en Rusia, estas críticas paradójicamente han fortalecido su liderazgo, ya que lo sitúan como una opción moderada frente a los extremos políticos. Además, Montes aborda el impacto de eventos como el Mundial de 2018, que mejoró la percepción de Putin en América Latina, y la guerra en Ucrania, que ha solidificado aún más su posición en la política rusa
El libro no solo analiza el ascenso de Putin, sino también los desafíos que enfrenta, como las sanciones económicas impuestas tras la anexión de Crimea y las tensiones con Occidente. Montes critica la visión de la OTAN y de algunos líderes occidentales, argumentando que han fallado en ver a Rusia como un posible aliado en lugar de un enemigo.
Marcelo Montes es un académico especializado en política internacional, con un enfoque particular en las dinámicas de Eurasia y Rusia. Ha dedicado su carrera a analizar las relaciones internacionales desde una perspectiva argentina, resaltando la importancia de estudiar las regiones euroasiáticas en profundidad. Montes ha participado en conferencias y talleres internacionales, colaborando con diversas universidades y centros de estudios, lo que demuestra su interés por las dinámicas geopolíticas de estas regiones.
Su enfoque académico ha estado centrado en las relaciones de Rusia con países clave de Eurasia y su rol en conflictos como el de Siria, donde ha escrito extensamente sobre la intervención rusa y su impacto global. En Argentina, Marcelo Montes es parte del Instituto de Relaciones Internacionales (IRI), desde donde contribuye al estudio de Eurasia, promoviendo acuerdos con universidades y centros de investigación de la región
Montes también ha realizado contribuciones sobre la política exterior rusa y sus estrategias en la post-Guerra Fría, vinculando temas como la guerra en Ucrania, las relaciones con el BRICS y su influencia en América Latina.
Marcelo Montes tiene una postura crítica respecto al liberalismo en el contexto de Rusia. En sus análisis, Montes argumenta que el liberalismo occidental ha tenido dificultades para echar raíces en Rusia, debido a las características históricas, culturales y políticas del país. Según su perspectiva, el liberalismo como ideología política y económica, promovido principalmente por Occidente tras la caída de la Unión Soviética, no logró consolidarse en Rusia, principalmente porque este modelo se enfrentaba a una sociedad que venía de una tradición autocrática y centralizada, donde el Estado siempre jugó un papel predominante en la vida social y política.
Montes considera que el liberalismo en Rusia fue percibido, durante la era de Boris Yeltsin, como un fracaso debido a las reformas económicas neoliberales que condujeron al colapso social, económico y político de la década de 1990. Este período, marcado por la corrupción, el caos económico y la pérdida de poder estatal, erosionó la confianza de los rusos en el liberalismo y preparó el terreno para el retorno de un liderazgo más autoritario bajo Vladímir Putin.
En contraposición, Montes señala que Putin ha logrado consolidar un sistema híbrido que mezcla elementos de mercado con un control estatal fuerte, algo que, según Montes, es visto por muchos rusos como una alternativa más eficaz y legítima que el liberalismo puro. Montes sugiere que Rusia se aleja del liberalismo occidental no solo por razones económicas, sino también por un enfoque de soberanía y defensa de sus propios valores, que difieren en aspectos clave como la moralidad social y el rol de la religión
En resumen, Marcelo Montes interpreta que la política rusa, bajo el liderazgo de Putin, ha sido una reacción y rechazo al liberalismo occidental, al cual se percibe como una amenaza a la identidad nacional y la estabilidad del Estado ruso.
Montes busca deconstruir la imagen de Putin en varios sentidos. Por un lado, desmantela las críticas convencionales que se le hacen desde Occidente, mostrando que muchas de ellas no logran captar la complejidad del contexto ruso. Por otro lado, el libro explora cómo Putin ha utilizado la crítica, tanto interna como externa, para fortalecer su legitimidad en Rusia, presentándose como una figura moderada frente a los extremos ideológicos. También revisa las estrategias de Putin para mantener el poder, incluyendo el control de los medios, el manejo de la oposición y su habilidad para proyectar una imagen de estabilidad y patriotismo
En esencia, Putin Deconstruido busca ofrecer una visión más matizada y completa de Putin, despojando las visiones simplistas para dar lugar a un análisis más detallado sobre su influencia y rol en el escenario global.