pinguinos

Aparecieron 370 pingüinos de Magallanes muertos en la Isla Quiroga, Reserva Provincial Ría Deseado, Santa Cruz.
Se sospecha que los causantes de esta mortandad son perros sueltos dentro del área protegida, según los biólogos que trabajan en la zona.
A fines del mes de octubre, momento en que se realizan los censos anuales de pingüinos, biólogos del Centro de Investigaciones de Puerto Deseado (Universidad Nacional de la Patagonia Austral) encontraron 370 adultos de pingüinos de Magallanes muertos en la Isla Quiroga, una de las ocho colonias de pingüinos de la Reserva Provincial Ría Deseado, vecina a la localidad de Puerto Deseado, Santa Cruz. Los individuos muertos representan aproximadamente el 12% de la población reproductiva de esta isla.
Previo a esto, a mitad del mes de octubre distintas personas de la localidad de Puerto Deseado observaron la presencia de hasta cuatro perros sueltos caminando entre los pingüinos de esta isla.
En ese momento se dio aviso a las delegaciones de Puerto Deseado del Consejo
Agrario Provincial (autoridad de aplicación en la Reserva) y de Prefectura Naval Argentina. Personal de ambas entidades se acercaron al lugar, pero para entonces ya los perros no se encontraban en la isla.
Se desconoce como los perros llegaron y se fueron de la isla, pero se sospecha que los mismos podrían haber cruzado a nado, ya que en otras oportunidades se han visto perros nadando en el canal que separa la isla del continente (aproximadamente 60m).
Se estima que los pingüinos llevaban de dos a seis semanas de muertos, y varios de ellos presentaban aún las marcas de predación (mordidas).
La mayoría no estaban comidos, lo cual suele ocurrir cuando un predador terrestre se encuentra con gran cantidad de presas juntas.
Si bien los pingüinos tienen predadores naturales (zorros, gaviotas, petreles, etc), los mismos suelen predar sobre los huevos y pichones.
Hasta ahora no existen registros de predación con esta magnitud sobre adultos de pingüinos en las islas de la Ría Deseado. Teniendo en cuenta esto y las observaciones actuales, se sospecha que fueron los perros quienes mataron a los pingüinos. Posiblemente hayan aprendido a cruzar a nado a la isla durante estos últimos meses.
En los últimos años se ha incrementado de manera importante la población de perros sueltos en la localidad de Puerto Deseado debido a la falta de responsabilidad de los dueños y a la falta de programas de control efectivo.
En las áreas aledañas, incluida la Reserva Provincial Ría Deseado, es cada vez mayor la presencia de jaurías de perros asilvestrados.
Por lo tanto, es necesario poder contar con un mayor control sobre estos animales domésticos sueltos en la Reserva por parte de la autoridad de aplicación (Consejo Agrario Provincial).
Sería importante poder detectar los perros causantes de esta mortandad y retirarlos del área, evitando así nuevos ataques sobre esta u otras colonias de aves marinas en la Reserva.
También sería conveniente establecer una red coordinada con otras entidades para la detección y acción temprana frente a este tipo de amenazas. También solicitan a los vecinos y a los visitantes de la Reserva dar aviso al Consejo Agrario Provincial (delegación Puerto Deseado) cuando observen situaciones que puedan dañar a la fauna local, como ser la presencia de perros u otros animales domésticos sueltos, personas
cazando o atentando contra la fauna silvestre, y otras acciones que no corresponden dentro de un área protegida.
Recordemos que el pingüino de Magallanes, si bien es el ave marina más abundante en la costa patagónica, se encuentra en un estado de conservación cercano a la amenaza. Por lo tanto es responsabilidad de todos proteger y cuidar a esta especie. El trabajo que dio lugar a esta nota fue elaborado pro el grupo de investigación “Biología y Conservación de aves marinas de Patagonia”, del Centro de Investigaciones de Puerto Deseado, el Instituto de Ciencias del Ambiente, Sustentabilidad y Recursos Naturales (ICASUR) y la Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA).