Cañadón Seco

En un día de alto contenido simbólico en Cañadón Seco se celebró el Día del Aborigen Americano. En el corazón de la comuna, a los pies de la Plazoleta “Pueblos originarios” se rindió homenaje a las culturas milenarias en una emotiva ceremonia presidida por Jorge Soloaga.

Como todos los años, los protagonistas centrales fueron los invitados especiales, referentes de los pueblos Mapuches y Tehuelches Nélida Huancalef y Nicolás Meliñanco quienes transmitieron a los presentes los valores culturales de sus antepasados, relatando sus historias de sufrimiento, persecución, muertes y luchas incluyendo en el presente los trágicos sucesos ocurridos en tierras patagónicas por la desaparición y muertes de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel dónde se vio involucrada a las fuerzas represivas del Estado como Gendarmería Nacional y Prefectura Argentina.

La bandera nacional, junto con la bandera multicolor que representa a los pueblos originarios se alzaron en lo más alto, contemplando a los vecinos, educadores y estudiantes que cada año celebran y rememoran los orígenes de los pueblos preexistentes con orgullo y reflexión.

 

Reencuentro

Desde el reencuentro en una jornada cargada de historia, reflexión y análisis el Presidente Jorge Soloaga mantuvo el eje en la comparación histórica desde la llegada de los conquistadores a todo el continente americano, con la posterior apropiación de los territorios considerados “desiertos” y la aniquilación casi total de los pueblos preexistentes.

“En esta fecha significativa recordamos a los pueblos originarios que fueron los primeros pobladores de estas tierras. De su tragedia, de su sangre derramada, su carne quemada y del sometimiento no podemos dejar de recordar a nuestros hermanos en nuestro territorio porque son quienes formaron parte del inicio de la vida en estos confines de la patria”.

Sostuvo “Hay que reivindicar las lágrimas derramadas por los pueblos autóctonos por causa de aquellos que se apropiaron de las tierras. El exterminio de una raza como los tehuelches es algo que nos perfora el alma” haciendo referencia a la imagen de un adulto tehuelche con una botella de ginebra bols que murió producto de que en su interior contenía estricnina.

Cito como ejemplo de la muerte de Santiago Maldonado y el asesinato de Rafael Nahuel reflexionando “Eso venimos a recordar hoy, para nosotros no es una fecha más, es un acto donde ponemos el acento en el reconocimiento de marcar estas simbologías fundamentales para saber de dónde venimos y hacia dónde vamos”.

Ya casi, finalizando el mediodía a pesar del temporal de viento y tierra. Ante la imponente escultura de un aborigen tehuelche mirando al sur envuelto en su quillango, toda la comunidad de Cañadón Seco celebra “el tiempo de estar despiertos.

De no repetir la historia. Nosotros los Argentinos, somos los indios de ahora”. Porque la cultura de un pueblo, a pesar de su sufrimiento, trasciende las fronteras y en el ‘Cañadón’ marca un rumbo de sentimientos sagrados dónde la reivindicación de su identidad se mantiene intacta.