Las zonas cordilleranas del sur de Chubut alzaron la voz ante la falta de precipitaciones en la región, por lo que se encendieron las alarmas por sequía, al confirmar que en la temporada llovió por debajo del promedio de los últimos 30 años y se teme por la provisión de agua en el verano.
La falta de lluvias afectará el caudal del suministro y anticipa riesgos para la cuenca hídrica del río Senguer, con su nacimiento en lago Fontana, que depende de las precipitaciones que se reportaron bajas en el análisis de los últimos 30 años, destacó Aldo Sánchez, del Servicio Meteorológico de Chubut.
Ante las estadísticas, el Gobierno de Chubut prepara una norma de emergencia y se anticipan medidas de prevención del agua para el próximo verano, así como protocolos ante las problemáticas que pueden surgir en torno a la sequía como los incendios, en un panorama que se prevé para fines de septiembre cuando la evaporación lleva al lago Musters a niveles muy cercanos al límite de las tomas de agua del acueducto entre Comodoro, Rada Tilly y Caleta Olivia.
Además de la disminución de las precipitaciones, según lo que publica Minuto Neuquén, la falta de nieve en la cordillera pone en riesgo no solo la actividad turística, sino que alerta sobre las medidas que se deberán adoptar para garantizar el abastecimiento de agua en la próxima temporada.
“En la primera quincena de junio hubo anomalía de temperaturas altas para gran parte del país, por encima de lo normal”, describió Sánchez y agregó que “en la segunda mitad de junio tuvimos el ingreso de una masa de aire de origen polar, que generó baja temperatura y precipitaciones en el centro y norte del país, con nevadas en Córdoba y San Juan, pero esta masa no generó muchas precipitaciones en la Patagonia. Y al comenzar el mes de julio tuvo un déficit de precipitaciones no solamente en la Patagonia, sino también en el centro del país, La Pampa y Buenos Aires”, resaltó para destacar la situación en la que se encuentra el país.
Finalmente, el meteorólogo advirtió que “Julio ha mantenido un bajo registro de lluvias y nevadas en la zona cordillerana, mientras que la proyección para los próximos tres meses, no anticipa un recupero importante de las precipitaciones en la región cordillerana”.
Decreto
El Decreto está preparado en caso de que el fenómeno no reporte mejoras, se indicó.
El presidente del Instituto Provincial del Agua, Nicolás Cittadini advirtió: “Yo soy optimista de que llueva en los próximos meses, pero por las dudas tenemos preparado el borrador de un decreto o ley de emergencia hídrica, en caso de que se dé el peor escenario”, resaltó.
Entre las medidas preventivas se exigirán cortes del suministro “a quienes tienen captaciones de agua en campos de la zona”, reclamó Cittadini y advirtió que “hay canales que en invierno siguen abiertos, aun cuando no se utilizan”, lo que despliega una gran pérdida de la llegada del agua del río Senguer y resaltó que al menos 3.500 productores rurales de toda la provincia ya fueron intimados para exigir un uso más eficiente del agua, así como la regularización de los sistemas de riego.
Asimismo, señaló que la prioridad es garantizar la llegada del agua del río Senguer hacia el Musters, para responder ante el abastecimiento de agua a las poblaciones que dependen de este sistema.